Margaritas, hay más de las que podemos pensar: Está la natural de toda la vida, la que enamoró a la España de los años 60, la de los mexicanos, la que no hace más que aparecer en camisetas y pegatinas de vehículos...incluso llegué a tener una de plástico con gafas de sol y una guitarra, que se movía al compás de cualquier ruido (que se entere Chikilicuatre de que no ha inventado nada, que no es más que una mera imitación de tan entrañable juguete). Por supuesto, también está la de los enamorados (que, en fin, son las mismas que las naturales, sólo que sometidas a tortura)...”me quiere...no me quiere”, ¡qué romántico! Seguro que más de uno ha hecho trampas, no ha dejado al azar esa decisión, y se ha preocupado antes de contar los pétalos para que el último sea el de la respuesta que quiere oír. Vamos, lo mismo que está haciendo el Hércules con Goikoetxea, y es que ya sabemos todos qué va a dictaminar el petalito de marras, con lo cual emoción no es que vaya a tener mucha cuando se produzca “el hecho”. La duda está en si va a ser antes, o después de la próxima temporada... y encima no lo pone fácil, y va y gana al Castellón, claro, que con la inestimable colaboración del conjunto orellut, falto absolutamente de actitud (gracias al cielo). Las casas de apuestas on line podrían incluir una sobre esta cuestión, total, ya que hay apuestas por cualquier chorrada (que si se mete un gol con la nariz se paga a tanto, que si a Aragonés le pica la famosa garrapata a tanto otro), una más no importa.
Pero mientras, nosotros a lo nuestro que es llegar cuanto antes a esos cincuenta puntos(ya se sabe la creencia popular que gira entorno a esta puntuación) y, tal vez, de Vigo se pueda sacar algo positivo en este sentido, y es que el Celta me está resultanto un tanto decepcionante para el papel que se le presuponía a principio de temporada..ya lo dije la semana pasada ...con el Hércules tout c´est possible (¡pero qué listos son los franceses, cachis la mar!)