martes, marzo 25, 2008

La fuerza de la voz

Hoy por hoy, es la de las pocas opciones a las que tiene para agarrarse la afición herculana, la única perjudicada si esto se deja caer en mitad de tanta crispación extradeportiva. Todo en la sufrida masa blanquiazul es desesperación por ver que las victorias no llegan; también se percibe animadversión y rencor hacia el entrenador por todo lo ocurrido desde finales del año pasado y los desafortunados comentarios; por último, las culpas se han extendido hasta algunos de los jugadores por su rendimiento y, sobre todo tras el frustrado viaje hasta El Ferrol, las miradas apuntan hacia Gonzalo De los Santos. El ambiente es desolador y el pesimismo flota sin nada que lo haga revertir. Incluso, hubo un intento de manifestación antes de las 5 de la tarde del próximo domingo pero que no ha quedado en nada, afortunadamente. Y digo “afortunadamente” porque éste es el momento más peliagudo desde hace unos años. Ni siquiera lo ocurrido hace dos años fue tan grave a pesar de llevar ahora más puntos que entonces: el equipo parecía ir a más y, aunque le costaba ganar, respondía en los partidos claves como aquel de Eibar en Ipurúa(0-1) , ante el Real Valladolid(2-0) , el Tenerife(1-0) o el Polideportivo Ejido(1-0). Incluso, el año pasado se vivió relativamente tranquilo aunque hizo falta ganar al Xerez y Real Valladolid para un poco de calma. Pero, en esta ocasión, los nervios se han desatado con motivos.

El panorama es preocupante y es el momento en que la voz de la afición aparezca para animar más que nunca. Se juega demasiado y toda la crispación debe quedarse de lado para animar más que nunca al club, a la entidad pues los jugadores pasarán pero la que queda es la afición. El Hércules debe sumar, como mínimo entre 13-14 puntos en los próximos doce encuentros. La perspectiva es que los partidos de fuera son muy difíciles para lograr algo, según el nivel mostrado últimamente, aunque alguna sorpresa se podría dar pero no es factible. Anoeta y Balaidos son estadios donde la presión del ascenso puede ser importante salvo que la Real Sociedad siga con su pequeña crisis o la extraña debilidad viguesa en casa; el partido clave a domicilio será en Tarragona donde hay que salir, al menos, con el goal-average a favor. Los tres últimos desplazamientos son bastante más duros( malacitanos e ilicitanos son de lo mejorcito en casa mientras el Sevilla B tiene su calidad y no es fácil que pierda). Por ello, la permanencia se debe saldar en el propio estadio Rico Pérez, donde a su vez se han escapado la friolera de 27 puntos de los 45 en juego). El objetivo venido a menos-seguir en Segunda- pasa por no dejar escapar puntos de los encuentros ante el Córdoba(“rey de los empates” y al que cuesta vencer a domicilio),el derby regional ante el Castellón, el Eibar(al que aún no se le ha vencido en Alicante)y, fundamentales por encima de todo, los duelos ante Polideportivo Ejido y Unión Deportiva Las Palmas. Con la esperanza de que el encuentro ante el Cádiz se juegue dentro de la más absoluta calma, el camino anterior se debe llevar al equipo en volandas aunque juegue mal, aunque le cueste llegar arriba. Que el mal recuerdo del descenso del Lucentum el año pasado sirva para recordar que, cuánto antes se resuelva el tema mejor para todos. Caer en el pesimismo y en enfados sólo puede llevar por el mal camino.

Apunte La (innecesaria) orden ministerial que obliga a las federaciones deportivas que no van a Pekín-2008 a convocar elecciones sigue produciendo enfrentamientos entre Lissavetsky y Ángel Villar. Cuando le daban la opción más estupenda para la reelección segura puesto que Alemany aún no es rival, el presidente de la RFEF se ha dedicado a vulnerar este ordenamiento con el deseo de que dicha orden acabe siendo derogada con la presión conjunta de FIFA y UEFA.