Una vez más, el Hércules no vence en casa en el estreno liguero. Desde la temporada 2001/02 no se logra el triunfo en el primer partido jugado como local en el estadio. Por aquel entonces, Fernando Béjar, el que iba a ser una gran empresa, lograba ese 1-0 ante el filial del equipo colchonero; desde ese año 2001 no se ha vuelto ver un inicio positivo: se empató ante el Valencia B(0-0) en una tarde de miércoles tras un aplazamiento que provocó enfado por la actitud "chulesca" del equipo "ché" de llevarse varios jugadores del filial a China y luego alegar que no podía jugar en Alicante. Un año después, era el Figueres quien lograba otro punto al igualar a cero en el Rico Pérez- uno de los ocho partidos consecutivos sin ganar que "logró" Granero con el Hércules- mientras el Huesca conseguía sumar su punto en un deplorable encuentro en el que el mister valenciano se llevó todas las broncas al ver como se quedaba sentado sin querer salir a dar ordenes al equipo; por último, el Málaga B y el primer equipo de la Costa del Sol sumaron sus puntos, si bien, el año pasado se hubiera alcanzado la victoria de no haber fallado el penalty por parte de Miguel; también hubiera ocurrido igualmente si el colegiado Alexis Pérez hubiera pitado penalty por la acción de dos defensas contra Tote. El equipo no mereció perder y le faltó un punto de agresividad y suerte para lograr la victoria ante un equipo que no llegó a inquietar a Agassa y que aprovechó un fallo de despeje de Redondo para que Calleja pasara y Couñago marcase: eficacia del 100%.
Del partido del domingo se pueden extraer unas conclusiones sobre el juego ya que el resultado quedó claro que fue injusto- sólo hay que recordar el comentario del entrenador Marcos Alonso sobre la suerte de tener una jugada, marcar y ganar- no lograr, al menos, un punto. En la portería, Agassa intervino de forma correcta y la duda sería si pudo hacer algo en el gol malacitano; en la defensa, salvo la discreta actuación de Redondo, estuvo bien el tándem Turiel - Sergio aunque se nota que no será la pareja habitual mientras que Albácar estuvo bien, mostrando las cualidades que tenía en el Alicante(chut potente desde lejos, sube la banda y, por el contrario, también cierta propensión a recibir amonestaciones); en el centro del campo hubo demasiado jugador aunque se puede llegar a entender pues es el lugar donde se gana medio partido; De los Santos estuvo correcto sin llegar a destacar, Montenegro tuvo la mala suerte de no marcar en las ocasiones que tuvo cuando trataba de rematar y Mantecón mejoró prestaciones hasta que la sustitución de Redondo obligó a retrasar su situación y no rindió tanto como antes. El tridente ofensivo porfió pero las cosas no salieron bien: Kike Mateo sigue siendo el guadiana- que unas veces aparece y en otras desaparece-; Tote estuvo participativo en la primera parte y casi desaparecido en la segunda y Xisco Nadal estuvo tan bien marcado que parecía desquiciado. De los recambios, un comentario sobre Sendoa: se ofreció en cuánto pudo pero no le salieron las cosas. Espero que el jugador vasco recupere el nivel mostrado en anteriores temporadas.
Apunte No siempre fue así: desde la 92/93(Lliria) hasta la 96/97(Extremadura) se ganó en el debut herculano en el Rico Pérez. Cinco años de victorias consecutivas que se alcanzaban tras otros cuatro años negros sin ganar. Por cierto, el Nàstic perdió los dos partidos iniciales de la 2005/06 y logró el ascenso que nadie esperaba en septiembre cuando el Sporting ganó 1-4.