Mientras que el primer equipo está buscando el modo de salir de los últimos puestos clasificatorios de 2ª División, dos plantillas del fútbol base han terminado su caminar por la competición, al menos, a nivel de poder cumplir los objetivos: el Juvenil A de División de Honor desciende a Liga Nacional-arrastrando al Hércules Juvenil B- mientras el filial de Regional Preferente languidece en mitad de la tabla, sin aspiraciones de ascenso ni peligros. En el equipo juvenil A, salvo la primera victoria a domicilio en la jornada inaugural, no ha levantado cabeza- ya hace dos temporadas salvó la cabeza al final de la competición- y ha asegurado su descenso con tres semanas de antelación. Del sexto puesto de la temporada pasada al último que ocupa en la actualidad es un salto demasiado negativo. Ni la veteranía de Josip Visjnic pudo cambiar las tornas de este equipo. El filial está ligeramente mejor-porque peor era imposible- pero no es plato de buen gusto seguir viendo a un Hércules B que sigue arrastrando por la categoría regional cerca de diez años. Como si aún estuviera pagando haber tirado la Tercera División por la borda allá por 2004. Lo ha tenido cerca en un par, tres de ocasiones pero por una cosa u otra, no se da el salto. Una temporada extraña en la que se puede sentir cierta tristeza deportiva pero, en lo formativo, ha visto que varios jugadores(Guille, Clausí, Eldin, Sellés, Jordi César) han jugado minutos con el primer equipo, mas el filial ha tenido un ritmo errático, acuciado por las ausencias.
Una vez más es importante resaltar que el trabajo de cantera es necesario. La evolución económica y deportiva del fútbol, con unos ingresos menores de televisión y patrocinadores, obliga a asumir una labor que algunos equipos llevan adelantada porque, en su día, ya creyeron que su futuro pasaba por los valores que salían de su fútbol-base. Independientemente de determinadas historias que me da que ocurren en más clubes de los que nos imaginamos(el tema de los padres por encima de los entrenadores, la elección de unos jugadores en detrimento de otros,etc.), lo que sorprende es que este club, sin haber hecho un trabajo serio, ha logrado sacar jugadores de la nada y lograr un buen rédito por ellos. La lista sería extensa porque el cuidado ha sido inexistente. De vez en cuando salía una buena hornada, como la de 1999(Toño, Gonzalo, Manolo Martínez, Verde, Fernando, Vicente), en otras ocasiones puntuales(Miguel De las Cuevas, Vicente-el que jugó con el Guadalajara el fin de semana pasada-, Raúl Ruiz, Kiko Femenía o, incluso, el mismo Eldin Hadzic). Hemos visto también perder varios jugadores que han ido a otros clubes porque la oferta global(dinero, instalaciones, proyección deportiva hacia el primer equipo) era más prometedora. Sigue sin haber esa ciudad deportiva seria(no me refiero, obviamente, a las instalaciones de Fontcalent) que sirva también de acicate a los jóvenes valores para quedarse o que vengan de fuera. Con dolorosa actitud “vendedora” si la oferta es buena para las arcas, ir limando esos números en rojo que delatan la gestión durante años...y eso que la venta de Kiko Femenía ya ha aportado bastante más que otros traspasos de jugadores fichados aquí.
Apunte En la Serie B italiana- similar a nuestra Liga Adelante- se ha establecido un tope salarial de 150.000 euros para los nuevos contratos de la próxima temporada. En sí, el tema no es grave pues sólo un jugador de cada cuatro supera esa barrera. Es, posiblemente, un camino que se acabe recorriendo en España.
Referencia:
Noticia sobre tope salarial: Noticia de IUSPORT sobre Serie B de la Lega.