Salva a la animadora, salva al mundo. Así rezaba el trailer de una conocida serie de televisión, en concreto, de serie que lleva por nombre “Héroes”. Un grupo de personas aparentemente normales, empiezan a mostrar poderes sobrenaturales, para después ir agrupándose en la natural dicotomía entre el bien y mal.
No sé si los guionistas lo hicieron así a propósito, pero una joven chica de dieciséis años, animadora de instituto, va a resultar clave para el desenlace de la historia, y es que posee un don muy especial: el de la regeneración.
Faltan los calificativos para describir lo acontecido el pasado domingo en el Rico Pérez (parece tan lejos, ya..). Era un secreto a voces que la relación entre Boquerón Esteban y la plantilla no eran buenas, pero los jugadores escogieron una mala opción para “hacerlo oficial”, y es que no se puede jugar con los sentimientos de una grada, de una afición que ve cómo se desvanecen sus sueños de permanencia. Eligieron mal el momento y, sobre todo, la forma de hacerlo. Esteban Vigo era fruta madura desde hace tiempo, incluso de haber continuado puntuando el equipo, lo más probable es que no hubiera seguido el año que viene (autogestión, es la palabra). Pero esta vez han calculado mal la fuerza, y además de la fruta, han tirado el árbol entero. Vuelvo la vista atrás y no encuentro justificación alguna ni para el juego del equipo (por decir que jugaron), ni para los olés, mofa y befa de la grada, ni..bueno, para qué seguir.
Quedan nueve partidos, muy justos para que el equipo pueda reaccionar, pues necesitaría casi un pleno de aciertos; y demasiados como para tirar la toalla. La buena noticia ha sido el parón liguero, y el hecho de que el próximo partido sea lejos del Rico Pérez, lo que permitirá tener tiempo para trabajar al nuevo entrenador; y también que se enfríen los ánimos en la grada. Ahora mismo jugadores y afición estamos condenados a entendernos por el bien del equipo, sólo un último esfuerzo por parte de todos, hagamos bueno el poder regenerativo de la afición.
Por de pronto prueba de fuego en San Sebastián, será este domingo (con intríngulis incluida) cuando sabremos si el equipo está en condiciones de reaccionar, y si no ha sido muy tardío el cambio de capitán y, sobre todo, si ha valido la pena Macho Hércules