Ha llegado un punto en el que ver un partido del Hércules CF fuera del Rico Pérez carece de interés. Ni siquiera la mínima alegría de romper tan fatídica cifra de 683 minutos sin marcar un gol a domicilio, aunque fuera el gol del honor. El juego oscila desde el vacío(como hace 9 días en Gijón, o en Mallorca, o en Pamplona) hasta el de carente de punch(dos o tres mini-ocasiones, una sensación leve de embotellamiento durante cinco-diez minutos en la primera parte,etc)pero del gol nada se sabe.¿Será que ha llegado el momento de borrar del ordenador cualquier atisbo del 0-2 en el Camp Nou?. A este paso empiezo a pensar que, cuanto menos recuerde ese espejismo, mejor pues recuerda un Hércules diferente, extraño...efectivo ante puerta. Tres goles en 990 minutos, una cifra aterradora que, al menos, ha servido para sumar seis puntos, más o menos en la onda de sus rivales en los partidos fuera de casa. No por ello nos debemos relajar pero sí mirarlo con perspectiva de que no se debe tirar piedras encima de nuestro tejado. El derrotismo de los jugadores se debe mutar desde la afición, el derrotismo de la afición es la condena directa a Segunda.
Sobre el partido, una vez más, nada que decir. En la línea de la semana pasada en el sentido de recibir rápido un gol y no haber el mínimo orgullo y capacidad de reacción. Las mismas sensaciones de imposibilidad de marcar goles porque, para más inri, para materializarlos hay que crear ocasiones y el equipo no logra atinar a dar los pases para que Valdez-el único que ha marcado fuera- o Trézéguet puedan utilizar su saber hacer que les ha convertido en una pareja ofensiva peligrosa. Sin nada de mérito, han logrado un cabezazo de peligro del paraguayo y otra ocasión de éste en la segunda parte que se fue fuera...lo que indica qué podrían hacer si se les surtiera de más balones. Ignoro si a esta hora han vuelto a decir los jugadores que aprenderán de esta derrota, la quinta por 3-0(al menos, la derrotas no son estrepitosas para el goal-average particular), porque han logrado anestesiar a la afición cuando juega fuera. Por mi parte, tranquilidad pues doy por hecho un cero mondo lirondo de puntos y goles en los próximos cinco desplazamientos y esperar que sé de la cara en los dos partidos a domicilio más importantes: Levante UD y Málaga CF porque Anoeta y el Vicente Calderón también serán coto cerrado para este Hércules inocente cuando juega fuera. Para más inri, ni queja puede tener de un arbitraje que perdonó la expulsión de Cortés, el penalty de Fritzler, etc. El resultado pudo ser considerablemente más duro de haber estado más acertados los jugadores vascos en la segunda parte.Ahora, tras el partido ante el F.C. Barcelona, llegará el duro partido en Mestalla donde, una vez más, habrá una mini ilusión por hacer algo y que no tardará en romperse una vez más.
Apunte Lo positivo es que quedan 10 partidos en casa y 8 fuera. De esos 10 partidos, siete u ocho son ante rivales directos en los que jugadores, cuerpo técnico y afición deben remar en la misma dirección(aunque alguno haya que se deba tragar el orgullo en beneficio del club). Ya se ha pasado esos cuatro partidos de cinco a domicilio desde aquel partido ante el Málaga CF.
Apunte Lo positivo es que quedan 10 partidos en casa y 8 fuera. De esos 10 partidos, siete u ocho son ante rivales directos en los que jugadores, cuerpo técnico y afición deben remar en la misma dirección(aunque alguno haya que se deba tragar el orgullo en beneficio del club). Ya se ha pasado esos cuatro partidos de cinco a domicilio desde aquel partido ante el Málaga CF.
