Sin duda, entre todas las noticias que aparecieron ayer en los medios de comunicación locales era la más destacada por el debate generado entre los aficionados.El asunto trataba sobre los pases a los jugadores de la asociación de veteranos-que no todos utilizan- que el club había convertido de gratuitos a ser pagados a la mitad del precio que se ofrece al público. No era una cuestión económica sino el gesto de una directiva y que, resalto, se une a otras tantas decisiones que han ido provocando enojos varios y hasta una manifestación como fue la de los abonados por los primitivos precios de los abonos que fijaron en su momento y en el que tuvieron que rectificar, pero que podemos extender, por ejemplo, a los abonados de 5 a 9 años. Aunque considero que la decisión de pagar el pase debe salir del propio ex-jugador, lo que no tiene sentido es invocar una situación delicada para instar a que paguen una cantidad cuando este club ha pasado peores momentos y nadie reparó en ellos para que ayudaran a dar ejemplo cuando, por ejemplo, los abonados no llegaban a 5.000 en la fatídica 2ªB. Incluso maledicencias podrían hacer pensar que el club quiere recuperar como sea ese millón tirado por la borda por un error burocrático y buscan cualquier solución para arreglar el desaguisado.
El importe que se puede obtener no será considerable y se podría haber valorado otros aspectos como la realización de labores en las que el club podría salir igualmente beneficiado en imagen que, a la larga(y no mucho) se convertiría en dinero. Por ahora, la asociación de veteranos han llevado el nombre del club tanto en sus encuentros con otros clubes veteranos en homenajes o a favor de la cura de determinadas enfermedades, y donde el nombre de Hércules aparece resaltado como beneficiaria de esa imagen de club comprometido con determinados colectivos como los enfermos de esclerosis múltiple o en beneficio del asilo de la tercera edad de Benalúa. O han colaborado con gestos de la Fundación-por ejemplo, Joaquín Albaladejo cuando fue a Togo- que han sido largamente aplaudidas por quienes ahora los toman como ricachones que deben pagar su abono. Aunque ciertamente algún veterano no ha estado especialmente acertado en sus comentarios, no hay que negar que es un gesto erróneo de quienes no tardarán en seguir dando de sí con otras medidas desalentadoras para el club. Hubiera sido más sencillo haberles reunido para solicitarles una mayor colaboración si consideran que sus pases están, para ellos-para el Hércules-, infravalorados. Muchos aficionados han esgrimido que el fútbol no es una empresa sino un sentimiento, aplaudieron las palabras de un comunicador de esta ciudad que recriminó a la hija de Enrique Ortiz aquello de que ella y su padre eran la SAD y "los aficionados, el Hércules" y que han aplaudido este gesto producto de una S.A. y no un sentimiento. En vez de buscar ayuda y gestos que ayuden a la imagen del club han preferido directamente el dinero en caja y, seguramente, con una descarada falta de tacto.
Apunte Ayer repitió Canal + Liga el encuentro de la final del Mundial de Sudáfrica entre España y cierto equipo que iba de naranja, que había usurpado el nombre de Holanda pero que se había confundido de deporte. A pesar de los tres meses de aquella final que unió a muchos españoles en la alegría de un triunfo, la tensión seguía estando ahí, esas entradas descomunales, ese par de paradas de Casillas, esas ocasiones erradas...ese gol de Iniesta que nos llevó a la gloria.