Y no, no ganó el Hércules C.F. al que le pesó ese punch, esa falta de experiencia ante unos "leones" que tampoco es que rugieran mucho...aunque, en ello, pueda estar uno de los méritos que tuvo el conjunto de Esteban Vigo en la tarde de ayer. Sin embargo, como ocurrió hace una semana, está claro que los despistes cuestan goles y, en la única ocasión que pudo zafarse de su par, Fernando Llorente marcaba el 0-1 definitivo. Decir que merecimos ganar sería exagerado pero un empate no habría extrañado ante los méritos de unos y otros. El Athletic entró mejor en el encuentro pero el Hércules, con el paso del tiempo, se fue quitando el dominio rival y se fue asentando sobre el terreno de juego. Poco a poco, el equipo se fue alargando y acercándose al área de Gorka pero sin mucho éxito. De esa primera parte, preocupaba la temprana amonestación a Noe Pamarot y la de Fritzler al tratar de cortar el ataque vasco. El conjunto de Caparrós fue inquietando de forma más espaciada aunque, a destacar, la falta de Susaeta que dejó un ay en la afición local mientras la rojiblanca celebraba por confusión el gol que no fue.
Tras el descanso, el chasco. Una falta ligeramente escorada fue aprovechada por Llorente. No había pasado ni un minuto y el Hércules CF encajaba el primer gol. Un poco trastocado quedó el equipo de Esteban y que el conjunto vasco no aprovechaba. El mister malagueño decidió que era momento de realizar los cambios, dejando espacio para que Kiko Femenía por la derecha y Thomert por la izquierda pudieran surtir de balones a Portillo. De esos minutos destacó la ocasión del "9" herculano que intentaba una vaselina que se iba por poco fuera. Con Tote casi con libertad de movimientos, se dio la sensación de mejores posibilidades de conectar con el delantero una vez que las bandas no atinaban a dar el pase preciso: Thomert tuvo más peligro cuando hacía casi de referente en la delantera que cuando trataba de centrar mientras el canterano no tuvo su día pero tampoco vale la pena insistir. Al final, el Hércules puso todo el corazón en igualar el encuentro pero, en esta ocasión, esa suerte no estuvo del lado blanquiazul y el marcador se quedó en ese 0-1 que, sin preocupar, impide empezar bien y...en dos semanas, el Camp Nou. A nivel general, la valoración fue positiva pero sin exagerar. A mejorar queda la sensación de lo que cuesta llegar arriba- aunque, como comenté en semanas anteriores, la vocación ofensiva debe dejar paso a un mayor cuidado-,también queda mejorar el problema de ambas bandas. Nos queda tener ese delantero que, como Llorente, sepa alojar el balón en las redes en las pocas ocasiones que se tendrán. A destacar, el buen papel de Tiago Gomes en el día de ayer.
Apunte De lo bueno que vi ayer en el estadio Rico Pérez destaco la gran labor de apoyo de los compañeros a Kiko Femenía tras unos primeros lances nada afortunados. Como Portillo corrió desde su puesto de delantero hasta la banda para darle palabras de ánimo, así como el segundo entrenador y Sendoa. Sólo al final del encuentro pudo realizar su labor como nos tenía acostumbrado. Quizás le pesó las expectativas que se cernieron sobre él y le acabó pesando durante unos minutos.