domingo, enero 17, 2010

Cuarenta minutos de locura

Poco imaginábamos que la alegría por el gol de Farinós iba a cambiar y quedar caras largas, caras felices de nuevo para cambiar de faz tras el último gol. El 4-4 es un resultado exagerado pero justo. En esta ocasión, la faceta delantera sobrepasó a la defensiva en ambos equipos. Poco quedó del encuentro controlado con 0-1 y que, con más o menos sufrimiento, había acabado así en el descanso. Ese gol de Rodríguez iba a dejar claro que era el inicio de una locura que, en la segunda parte, se hizo patente. Respecto a la primera parte, el juego fue más de respeto entre ambos equipos y donde Cobeño y Calatayud apenas intervinieron. Es más, la segunda parte llevaba la misma pinta hasta que llegó el penalty a favor del Hércules, un doble agarrón a Tiago Gomes más por insistencia que por intensidad. Farinós marcaba de penalty y lo hacía volviendo a su forma habitual-sin tomar carrerilla- y por el centro de la portería. Con 0-2 los tres puntos volaban a Alicante hasta que la siguiente jugada lo cambió todo. Piti, el ex jugador herculano, hacía jugada particular y mandaba, desde la frontal, el balón hasta las redes. Cambió todo.

Porque si hay algo que destaca en el fútbol es que las dinámicas dicen mucho. Al Hércules no le había dado tiempo a mantener la ventaja ganada mientras el Rayo entraba en el partido de la mejor manera, con expectativas de dar la vuelta. Presionaron adelante y no tardaron en lograr el empate en un penalty que, dudoso o no, daba la oportunidad de dar la vuelta al marcador. David Aganzo colocaba el 2-2...y el 3-2 en un saque de esquina en el que marca de cabeza más por mérito de él que fallo de la defensa. El equipo blanquiazul quedaba totalmente grogui, se intentaba cambiar las cosas con el cambio de Danciu por Portillo. En una de las tímidas llegadas para buscar el 3-3 el colegiado obviaba un toque a Peña que pudo haber supuesto un penalty; sin embargo, el colegiado había cerrado el grifo de las penas máximas pues otra se pidió en área herculana que tampoco se pitó. En una falta a 30 metros, repetición del primer gol, un defensa rayista marcó en propia puerta y colocaba el 3-3 con cierto toque de suspense tras levantar el linier el banderín. En plena inercia positiva, un fallo local lo aprovechaba Delibasic para colocar el 3-4 cuando faltaban dos minutos para el final de los 90 minutos. Un fallo en un contraataque impidió acentuar la ventaja alicantina y, poco después, el Rayo Vallecano lograba el empate que, sinceramente, fue el resultado justo a los méritos de uno y otro en un remate de cabeza que Calatayud no logró evitar que entrase en la portería tras tocar el travesaño. Es cierto que fue ese tipo de partidos que te dejan mal sabor de boca porque se tenía la victoria pero también se ha estado unos 5-10 minutos grogui con ese 3-2 que habría hecho más daño.

Apunte Inexplicablemente, el partido que se jugará ante el Real Unión de Irún se jugará ante las cámaras de Punt 2 y, supongo, ETB. Sorprende porque era un partido más de domingo por la tarde que otro horario. Si a eso le unimos que las posibilidades de retransmitir el Hércules CF- CD Castellón es bastante factible, sigue siendo el Hércules objeto de los medios televisivos.