Se podría decir que iba a ser una crónica agridulce pero, como algún cronista lo ha escrito, recurro a un titular parecido a lo que pasó ayer. Amargura porque no sirvió para nada, hemos quedado cuartos definitivamente-por cierto, absoluto muermo de jornada 42 que se avecina sin nada en juego que valga la pena-, marcando ya una cifra que colocará al Hércules en la pequeña historia de Segunda División hasta que otro pobre equipo le ocurra lo mismo. Va a ser una puntuación que indignará en futuros años porque se verá subir a equipos con menos puntuación que la obtenida por el Hércules(75 puntos en la jornada 41 que se pueden convertirse en 78) y que le va a dejar fuera del ascenso por la mala suerte que se ha tenido con los compañeros de viaje(impresionante galopar de los cuatro equipos en la segunda vuelta que han marcado cifras de "salvación" si hubieran empezado a cero en la segunda vuelta) y por puntuales lances como el penalty de hace dos semanas o el gol anulado injustamente en Huesca. Con el fin de la temporada, el análisis será más específico y se mirará en otros encuentros pero lo que queda es un doloroso cuarto puesto, esa famosa medalla de chocolate(negro, por ser un poco más amargo que el otro...y porque nada vale) que se lleva el equipo. El destino le debe ya una al Hércules.
Respecto al partido de ayer, fue entretenido y con goles de bella factura. Ante un rival que fue un sparring- desde hace unas semanas lo ha sido- y que se puso por delante para acabar sucumbiendo, el Hércules se quería despedir dando buena imagen para disfrute de la afición.Por empeño, el equipo mereció que los resultados de otros campos ayudaran, pero también se cierto que le quitaron todo el dramatismo a la tarde y convirtieron la tarde de transistores en plácida tarde para despedir a los jugadores: algunos los volveremos a ver la próxima temporada; a otros se les verá con otra camisetas, con la esperanza de que se les haya quedado marcado este año en el corazón y vuelvan cuando puedan. Aunque de todos, hay dos protagonistas a destacar en el partido de ayer: Sergio Fernández, apoyado por la afición los 90 minutos en su particular pulso con el Consejo de Administración por la renovación; por otro lado, esas manos de Farinós pidiendo perdón a la afición cuando marcó el 3-1 de penalty, aún dolorosamente arrepentido de su fallo de hace dos semanas. El último tanto de Fernando Sales, un tiro cruzado desde treinta metros, fue el merecido broche para esta histórica 2008/09 que se acabó ayer en el Rico Pérez aunque quede el partido de El Helmántico. Con todo,la verdadera dulzura llegó con el final del partido y la invasión del terreno de juego. El ambiente de la Puerta 0 fue impresionante y ojalá sea la verdadera semilla de la comunión afición-equipo desde el primer minuto. Fue lo mejor que muchos aficionados nos llevamos a casa.
Apunte Poco a poco se va acercando el Hércules a sus objetivos. En la primera temporada se salvó del descenso en la penúltima jornada; en la siguiente lo hizo en la antepenúltima; en la pasada llegó a 58 puntos y el sexto puesto y, en esta ocasión, tiene la oportunidad de superar esa cifra en 20 puntos y un cuarto puesto. Además, es la primera vez desde el regreso a Segunda que se termina la liga ganando en el Rico Pérez y dejando un buen sabor de boca.
