Cuando Andrija Delibasic marcó el tercer tanto del encuentro ya comenzamos a creer que la victoria no se escaparía. No lo escribía por ser marcado en el 88’, ni porque expulsasen al montenegrino por quitarse la camiseta-tiene miga amonestar por eso y no por algunas faltas alevosas que se quedan sin tarjeta amarilla- y hubiese que jugar con 10 los últimos minutos. La de ayer fue una victoria que valió por tres porque sirvió para terminar de destapar a un gran jugador como es Raúl, el chaval de la cantera e internacional sub 21, que, tras una jugada en la que se metió entre dos jugadores de la zaga oscense, estaba frente a frente con el portero y lo batió irremisiblemente; en segundo lugar, porque era una victoria muy necesaria para no descolgarse ante los previsibles tres puntos que ganaría el Real Zaragoza ante el vicecolista y, tercero, porque era una victoria que, a su vez, es una demostración de este Hércules 2008/09 que supera las adversidades con cierta facilidad y venció al mejor rival que ha pasado por el Rico Pérez en esta temporada. La osadía del equipo azulgrana fue impresionante de principio a fin.
El encuentro se desarrolló de una forma inesperada. La salida en tromba de los visitantes inquietó a la afición que, sin llegar a pitar, si mostraba cierto temor a unos jugadores que ya han vencido a más de uno con nombre. A medida que pasaba el tiempo el control del Hércules se iba aclarando más; las jugadas de peligro empezaban a llegar a las inmediaciones del guardameta aragonés. César abría la lata de forma tan desconcertante que más de uno ya miraba al linier de tribuna con el temor a que señalase cualquier anomalía.A partir de ahí se vieron buenos minutos en los que el 2-0 estaba a punto de caer en cualquier momento gracias a la movilidad que dio Morán al ataque herculano. Sendoa tuvo un mano a mano que, al final, estrelló en el cuerpo del portero, un disparo de Raúl que salió rozando el poste, etc. Fue el único momento en que estuvo el equipo visitante totalmente desdibujado. En la segunda parte, la imagen fue la misma: salida en tromba del conjunto azulgrana que, en esta ocasión , sí acierta a marcar el gol del empate ante un fallo de César en el marcaje deja al delantero sólo ante el portero y marcando. Ahí es cuando aparece Raúl con dos jugadas de mérito: en la primera se zafa por velocidad de su par, llega hasta el fondo pero su centro no lo remata nadie; en la segunda fue el tanto de la tarde, con permiso de Delibasic. La SD Huesca no se rendía y recibe el premio de un penalty que el árbitro…más cerca de la jugada que el linier, tarda en pitar y lo hace señalando los once metros. Faltaban siete minutos para el final. El Hércules atacaba con los dos puntas-aunque Deli casi retrasado a posición de interior derecho- y en un saque de esquina, tras un parada del portero en la jugada anterior, llegó la apoteosis en forma de remate del balcánico que marcaba el tercer gol del partido…y el tercero suyo en competición desde aquellos dos goles al club cordobés-entre el minuto en que marcó el gol y los tres meses sin marcar, se perdona una tarjeta amarilla estúpida- dieron la victoria al club blanquiazul. De ahí al final silbidos para que el colegiado pitase de una vez el final del encuentro.
Apunte Aunque es casi imposible, hay una opción aún de auparse al tercer puesto en caso de derrota jerecista por dos goles de diferencia ante el Nàstic pero es muy poco probable.