El Hércules ganó su primer partido tras tres semanas de dudas latentes, si bien era injusta esta situación teniendo en cuenta que se había perdido hasta cuatro puntos en los dos partidos caseros. Sin embargo, la evolución era positiva ,como así mostré en el artículo del domingo y el del martes, y era de esperar que cayera la primera victoria. Y llegó. Dos goles que han permitido lograr una victoria con sabor y buen recuerdo. El rival, viejo compañero en estos seis años en el pozo de la 2ªB, vio como el equipo blanquiazul- rojillo en esta ocasión- le volvía a amargar otra tarde de fútbol. Las estadísticas, decían algunos, tenían que romperse en este partido pero no ocurrió así felizmente. Es que la verdadera tendencia era que, a una victoria del Castellón en su feudo ante el Hércules, el equipo alicantino le devolvía el resultado y vencía. Por encima de todas las últimas victorias en Castalia, los herculanos tenían en mente ese 1-2, como el de ayer, que el equipo dirigido por Visjnic inflingió al de Oltra que iba haciendo historia tras 30 jornadas sin perder. Cual maldición, el Hércules volvió a repetir unos meses después en una de las escasas tardes apoteósicas con Granero de entrenador; el año pasado fue un lapsus pero tampoco el equipo mostró sus cualidades que ayer si mostró. No se rompió la estadística, estaba claro que se ganaba.
Del partido de ayer, la afición herculana puede ver varios aspectos positivos por lo "terribles" que serán para Mandiá: el buen partido de Moso obligará a que el "descanso" de Sergio Sánchez se prolongue unas semanas más, que Vicente Verdejo tendrá que poner más de sí para quitarle el puesto a Palacios que lo hizo bien a pesar del fallo del penalty, que Toché mostró buen estilo delante de portería, que cuando la suerte acompañe en algunos de los disparos se puede ver buenas tardes de gol(el disparo cruzado de Cámara, el disparo de Mateo, ese balón que rozó el palo sin que Moisés pudiera llegar a tocar,etc. El último cuarto de hora pudo ser de escándalo de haber estado acertados ante un equipo, el castellonense, que se hundió pese a marcar el gol del empate. La salida de Borreguero insufló nuevos aires al equipo, que empezó a crear más peligro que en la primera parte. El gol de Toché resultó decisivo y la victoria se logró mostrando una imagen que, sin crear ilusiones, recuerda al de la temporada pasada y con el anhelo de la afición de que no se llegue a sufrir como parecía pensar estas tres jornadas. Eso sí, la mejor lección para los jugadores será que sólo se puede ganar si se va al 100% en cada partido. Afortunadamente, la imagen que se ha dado en la segunda parte de Castellón se aleja de aquella de la primera jornada.
Apunte En la rueda de prensa posterior al encuentro, Martín Delgado, entrenador local, mostró todo un repertorio de "mea culpa" bastante inaudito en los entrenadores de hoy en día. Su tono fue tan lastimero que sería incomprensible que no hubiera cese o dimisión irrevocable en las próximas horas. El ambiente en Castalia empieza a ser agobiante. Aún perdura el recuerdo del buen hacer de Fernando Colomer & Álvaro Cervera.