Dos géneros que reviven en el circo en el que se ha convertido el Hércules C.F., a diferencia de la novela trágica y de suspense que rodea el devenir del C.Baloncesto Lucentum. Divertimento, eso sí, para aficionados no herculanos. Para el sentimiento blanquiazul es duro ver un desastre continuado en cada noticia que se publica en la prensa o se escucha en la radio y que va minando la moral. Se sabe que es un club que, salvo escasos espejismos, no es que haya sido prodigio de organización pero que, en este año, supera acontecimientos anteriores y se acerca el abismo como si supiera que llegamos a esa célebre segunda temporada tras un descenso, al igual que en 1988 y 1999.
Una historia que tuvo un preludio en forma de rumores de regreso de Portillo en toda la temporada y que se acrecentaron a partir de aquel partido ante la UD Las Palmas en Alicante, en la primera vuelta. Rumores que tuvieron su especial amplificador cuando se supo que Portillo había rescindido su contrato con el conjunto canario debido a una negociación a la baja, por parte del club, en las fichas de sus jugadores ante la falta de ingresos. Ello, sumado a otras historias más de sainete, comenzó a romper una baraja que ya estaba con las cartas marcadas, como era la ruptura de Sergio Fernández y Juan Carlos Mandiá y que, de seguro, remató tan triste espectáculo sobre el césped de Alcorcón hace, quién diría, casi un mes.
Tres días después explotó el tema con Sergio Fernández: se quiso imponer la contratación de Portillo y la lógica negativa del leonés ante tal decisión que no es baladí, ya que aceptar el jugador abre, además, una duda lógica de los aficionados sobre otra factible acerca de la alineación del "9" madrileño en el once inicial. Parecía que la tormenta se iba a dar en aquella tarde del día 13 de junio y ya. Pero no, sólo fue el inicio de un constante devenir de "tiras y aflojas". Se unía en este esperpento el asunto del entrenador lucense que pasó de ser descartable por parte de Sergio Fernández a tener los poderes según Ortiz. Ahí se fraguó la bicefalia que está perdiendo jugadores.
No contento con esto, unos pocos días después, se incorporaba al Hércules Jesús García Pitarch y Francisco Ors, con el objetivo de planificar y también de desanimar al director deportivo leonés a la hora de resolver el contrato con el Hércules C.F.; el siguiente episodio del circo consistió en ir llamando a varios jugadores de la plantilla con contrato para decirles que el entrenador no contaba con ellos. De la respuesta poco hablaré porque la indiferencia era lo habitual. Y para rematar la fiesta del humor, para quién lo encuentre, el pasado martes se nombraba a García Pitarch como presidente del Hércules C.F., buscando una cosa(la famosa paz interna) y la contraria (que acabe por dejarlo Sergio Fernández, cansado de un equipo que, una vez más, no tiene remedio).
Lo que está claro es que estamos a día 5 de julio, no hay campaña de abonos(aunque lo habitual era que la presentaran entre el 12-13 de julio, en este año puede ser que la primera jornada acabe por ser en el Rico Pérez el 18-19 de agosto y sea necesario empezar antes), sin presentar las camisetas(aunque tampoco sería descartable que siguieran los modelos del año pasado) pero, sobre todo, con una plantilla en cuadro y que, para más inri, a la mitad la quiere fuera el entrenador y la "nueva planificación". Como ven, unos ingredientes para un desastre en el que las risas saldrán de todo aquel que no sienta estos colores.
Apunte Y si quieren más esperpento, aquí les dejo con otro más. El Orihuela C.F., con problemas por el tema de los avales, ha encontrado en Jaén un asidero al que cogerse para evitar caer en Tercera División. Dicho asidero consiste en un auto del Juez de Primera Instancia nº4 instando a la RFEF a que se devuelva al conjunto andaluz a 2ªB y deje sin consecuencia el asunto de los avales y sus consecuencias por estar el club en procedimiento concursal.