Cartagena tiene, en su historia, dos referentes a tener en cuenta por encima de otros: en el primero, Carthago Nova era el nombre romano que hacía referencia expresa a la antigua Carthago, antigua ciudad del norte de África y que luchaba por el dominio del Mediterráneo con todo un imperio como el romano y que fue derrotada; en el segundo, el famoso cantón de Cartagena durante la I República(1873-1874) y que fue una repulsa hacia la propio gobierno republicano por unas medidas que supusieron el levantamiento de esa zona. La ciudad ha vivido de estos dos recuerdos que le ha dado relevancia. Aunque Carthago Nova, creado municipio romano por el general Escipión, no destacó por su carácter bélico, el cantón sí que lo tuvo en cuanto se rebeló contra el gobierno aunque es cierto que estuvo bastante inestable ese período de tiempo.
Cartagena vivirá otra "guerra" bien diferente el próximo domingo a las 9 de la noche. Una guerra donde veintidós colosos van a disputar un encuentro donde el signo "quinielístico" de la "x" será tal enemigo de los dos que se espera un duelo de ida y vuelta en el mejor de los casos. El acierto en el intercambio de golpes decantará la balanza de un lado a otro. En un lado, la pareja Toché-Victor; en la otra, la previsible Danciu-Portillo(salvo que el entrenador considere que Delibasic merece superar los cuatro goles de la pareja antes citada ante el Albacte Balompié). La defensas deberán evitar que los delanteros campen por el área como Pedro por su casa. Para ese encuentro, será fundamental que el Hércules CF se crea de verdad la sensación de final que se está percibiendo desde hace tiempo. Será el momento de olvidarse de ese "temor a ganar" que tiene este equipo y que traba su actitud(tan necesitados de ganar fuera que hace tiendan a recular para evitar el empate...pero que tampoco pueden evitar) y hace ver que no es un problema de ambición.
Cartagena vivirá otra "guerra" bien diferente el próximo domingo a las 9 de la noche. Una guerra donde veintidós colosos van a disputar un encuentro donde el signo "quinielístico" de la "x" será tal enemigo de los dos que se espera un duelo de ida y vuelta en el mejor de los casos. El acierto en el intercambio de golpes decantará la balanza de un lado a otro. En un lado, la pareja Toché-Victor; en la otra, la previsible Danciu-Portillo(salvo que el entrenador considere que Delibasic merece superar los cuatro goles de la pareja antes citada ante el Albacte Balompié). La defensas deberán evitar que los delanteros campen por el área como Pedro por su casa. Para ese encuentro, será fundamental que el Hércules CF se crea de verdad la sensación de final que se está percibiendo desde hace tiempo. Será el momento de olvidarse de ese "temor a ganar" que tiene este equipo y que traba su actitud(tan necesitados de ganar fuera que hace tiendan a recular para evitar el empate...pero que tampoco pueden evitar) y hace ver que no es un problema de ambición.
La guerra ha empezado desde el mismo lunes: el tema de la ruptura del acuerdo por el que las entradas debían de valer el mismo importe que pagaron los aficionados blanquinegros en enero cuando habían podido ver a su equipo por 15 euros. Sorprendió de forma desagradable ese salto de precio; sobre las mil entradas, se luchó para obtener más pero la realidad es que el municipal Cartagonova tiene un aforo determinado e inferior al Martínez Valero y la Nueva Condomina. Eso ha llevado prácticamente a romper relaciones entre ambos clubes y que no contribuye a calmar el ambiente negro que se avecina pues la tensión que habrá el próximo domingo ya es considerable como para, encima, azuzarlo.
Apunte Un pequeño factor de optimismo es que el estadio Cartagonova no ha dado "problemas" tras el "Cartagenazo" en el Rico Pérez en 1991. Desde entonces, el Hércules ha vencido en tres ocasiones(91/92, 99/2000 y 00/01) y empatado en otras dos(92/93 y 03/04). Ojalá no se rompa en esta ocasión pues una derrota puede ser casi decisiva.