Es impresionante esta temporada en Segunda División, por mucha Liga Adelante que se llame. Al igual que ha habido emoción con la persecución entre el Real Madrid y el F.C. Barcelona y que ha hecho que los campeones hayan alcanzado una cifra de puntos colosal para no caer en la presión merengue, en esta categoría hay cinco equipos que se han decidido a no parar de luchar por el ascenso-el Rayo Vallecano sigue en liza aunque sus tres puntos de distancia con el Real Zaragoza parecen dejarle lejos...si no fuera por el partido de la última jornada en Vallecas- y están marcando unas cantidades impresionantes: Sporting subió tercero la temporada pasada con 72 puntos y ganando en la última jornada mientras que, en esta temporada y a falta de cinco jornadas, el Real Zaragoza tiene 68 y el Tenerife, 69; las cifras que algunos comentan superarán los 74 puntos míticos del Atlético de Madrid que no subió y que tenía la marca de mayor puntuación sin ascender y que pueden estar por los 77-78 puntos. El Hércules CF ha dado su zarpazo particular y, aunque no se perciba en la tabla puesto que se sigue en el cuarto puesto, ha metido en la lucha al equipo tinerfeño que tenía en sus manos dejar medio sentenciado al equipo local mas no pudo ser. El once blanquiazul, con una primera parte de eficacia y buenos momentos de juego, se quitó de una vez el fantasma del encuentro ante el Xerez, un partido aquel que dejó un poco tocada a la afición; cuando muy pocos creían en la victoria ante los canarios , tras el juego desplegado en la tres últimas jornadas, llegó el triunfo que nos recordaba al Hércules de la grandes ocasiones como la victoria ante el Real Zaragoza, el empate ante la Real Sociedad, etc.
El 3-1 quizás no ha reflejado la igualdad en el encuentro; no es que no se mereciera ganar el equipo blanquiazul pero el resultado pudo ser, por instantes, excesivo pero los jugadores querían congraciarse a pesar de que el encuentro no comenzó nada bien: el equipo de Oltra salió a por el partido desde el principio y suyo fue el primer disparo a puerta; poco a poco, se iba acercando el Hércules a las inmediaciones del cancerbero Luis Garcia. El club visitante movía el balón y presionaba cuando no lo tenía pero nada pudo hacer con el primer arranque de eficacia: pase a Delibasic que sólo tiene que driblar al portero para marcar el primer gol; el equipo visitante, que hasta ese momento había mostrado un poco más de juego e intenciones, se vio superado durante un tiempo en el que Farinós tuvo el 2-0 en una falta que da en el travesaño y el rebote no es cazado por ninguno de los delanteros; el equipo granate fue hacia la portería de Calatayud para buscar el empate que tuvieron en un par de ocasiones; pero este Hércules quiso demostrar ante la pareja Nino-Alfaro que también tienen esa proyección peligrosa y marcaron a partir de un saque largo de Calatayud hasta el propio Delibasic, que se zafa de Manolo Martínez, para materializar el 2-0; unos instantes después, la falta sacada por Farinós es fatalmente despejada por el cancerbero pero el esférico suelto acaba en las botas de Abel Aguilar que sólo tiene que golpear levemente el balón para alojarlo en las redes: 3-0 antes del descanso era lo menos esperado. En la segunda parte, el equipo tinerfeño salió al ataque con el objetivo de un gol tempranero para levantar el ánimo y crear un poco de nerviosismo. El juego no fue vistoso y menos con el gol del honor de Nino; en un mano a mano tuvieron el 3-2 pero Calatayud intuyó el peligro y evitaba un tanto peligroso; por parte herculana, no se vio rondar mucho por las inmediaciones del portero canario pero tuvieron sus ocasiones para el 4-1 que hubiera sido el jolgorio absoluto; entre la poca proyección final-más motivo del cansancio que otra cosa-y el juez de línea que anuló dos jugadas de mano a mano por fuera de juego, el encuentro entró en una pequeña etapa de sopor hasta que el colegiado pitaba el final del "match". Ahora queda el encuentro en Huesca, tres semanas en el Rico Pérez para acabar en Salamanca; teniendo en cuenta que nadie cede, cada partido es un peligro que, como comentaba en semanas anteriores, se va a decidir, aparte de jugadas puntuales, por la fortaleza mental de cada uno de los contendientes.
Apunte He querido dejar en el apunte el extraordinario aspecto que mostraban las gradas del Rico Pérez. Más de 24.000 espectadores han acudido al estadio a ver un encuentro que parecía más de Primera División que de Segunda División. De ganar en tierras oscenses, lo que no será fácil, el día del R.C. Celta de Vigo puede ser más impactante todavía. Es el momento de dar el "do de pecho".