domingo, mayo 02, 2010

Ni un milagro

Puede que suene a demoledor pero es así. Querer creer en un ascenso suena a milagro cuando la segunda vuelta volatiza ilusiones. Y lo peor para ellos es que las excusas no valen nada. En su día comentaba varios aspectos como determinadas ausencias primordiales, también el bloqueo de ideas pero hoy poco se puede decir. "Alea jacta est". La suerte está echada. Si antes consideraba que el Hércules dependía de sí mismo, porque aún podía tener su opción ante rivales como Levante o Cartagena, hoy se puede decir que depende de los demás. Incluso el club departamental podría estar distanciado del Hércules cuando los alicantinos vayan a jugar allí. La derrota de hoy(y, afortundamente, no se ha perdido el gol average particular) hace más daño del deseado pues frustra todo ese anhelo de recuperación. No, el Hércules no se ha recuperado de esa travesía en el desierto. Se ha quedado exhausto mientras el equipo de Luis García Plaza remontaba y pisaba el área grande de Calatayud con una facilidad insoportable. Lo triste es que no se puede decir nada: la derrota ha sido justa y sólo queda lamentar ese momento clave del fútbol.

El marcador reflejaba el 0-1 ,tras el brillante gol de Delibasic a centro de Sendoa, cuando Tote pudo tener en sus pies el segundo gol- reconozco que nada asegura la victoria pero creo que las cosas habrían cambiado con una mayor ventaja- pero su remate de rabona lo rechazó el guardameta local enviando el esférico fuera de la portería. Lo que en su momento pareció una frivolité ha acabado siendo la culpa de todos los males del día de hoy. Sobre su remate sólo decir que la rabona es una "técnica" que, a veces, esconde una deficiencia que tienen algunos jugadores de no tener seguridad en uno de sus pies. Si el disparo hubiera entrado, la gente habría aplaudido a rabiar mas el fallo es similar al que sufren los jugadores que lanzan un penalty"a lo Panenka"(ya saben, elevando la pelota por el centro cuando el portero ya se había tirado a un lado...salvo que éste sepa "esperar" el tiro) flojo al portero. Ese fallo que cabreó al entrenador Esteban Vigo fue, por desgracia, el punto de inflexión entre 25 buenos minutos de dominio blanquiazul y el posterior dominio local. El empate a uno llegó en una descolocación en la defensa herculana en una triangulación veloz. El 2-1 se veía llegar y lo hizo para desesperación blanquiazul. Aún quedaban más de 20 minutos(contando con la prolongación) pero el sueño de remontar se frenaba a los tres minutos con la expulsión de Peña. Se pudo lograr el empate con un remate de Kiko Femenía o una falta lanzada por Farinós que se fueron rozando el poste pero casi se podría definir injusto. El próximo lunes llegará el partido ante el Córdoba CF, ya se verá si en esos momentos el sueño del ascenso es factible o se aleja de los dedos.

Apunte Hay que cuidar de los datos estadísticos. Toda la semana diciendo que Luis García Plaza no sabía lo que era ganar al Hércules...para lograr la victoria contra los blanquiazules. A ver si recuerdan la mala suerte del herculanismo cuando se encuentra con Lucas Alcaraz, con un poco de suerte se gana.