Faltan
ocho semanas para terminar la competición de la Liga Adelante. Se
llega a esa situación con tres equipos empatados a 35 puntos, otro
con 36 y el que parece que está avanzado, pero no salvado, gracias a
sus 38 puntos. Una dura pugna en el que tres bajarán a 2ªB-una vez
que la otra plaza es del Xerez C.Deportivo- y dos salvarán el
cuello. Luego el tiempo dirá si hay problemas extradeportivos con
determinados equipos. Una liguilla con varios encuentros entre ellos,
con gran tensión por lo que hay en juego. Por cierto, una situación
tan igualada y con tantos puntos como la vivida en la temporada
2007/08. En esa jornada 34, el Nàstic(21º) sumaba 36 puntos, tres
equipos empatados a 37(Xerez, Córdoba y Albacete) y otro con
38(Deportivo Alavés. Curiosamente, en la jornada 42, ninguno de
ellos bajó porque cayó el Cádiz C.F.(sumaba 45 y acabó en 49), un
Granada 74(sumaba 41 y también sumó cuatro puntos más) y el Racing
de Ferrol(también estaba con 41 puntos y lo dejó en 50). Esos
cuatro que se salvaron sumaron cantidades como los 16 puntos del
Nàstic en ocho partidos) o los 15 de Xerez C.Deportivo.
Los
partidos a disputar entre ellos son de siete puntos, claves, por
tanto. Para los blanquiazules, quedan cuatro fundamentales(Huesca,
Mirandés y Real Murcia en Alicante y, ante el Racing, en Santander).
En sí, es el que tiene el calendario más relevante de los cinco
equipos(cuatro rivales directos, cuatro equipos sin nada en juego)
mientras los demás están recorriendo el camino que ha realizado el
conjunto blanquiazul. Por ejemplo, el Racing está por la mitad de
ese “Tourmalet” que realizó el Hércules por febrero y marzo;
igualmente, el Real Murcia está en ese camino mientras que la S.D.
Huesca tiene un calendario un poco más exigente. Lo curioso es que
hay un equipo que va a ser juez de la competición: el Club Deportivo
Guadalajara, quien debe jugar contra cuatro de los cinco equipos que
están abajo.
El
único problema que puedo ver en esos encuentros es que haya más
nervios de los debidos. Quien menos los pierda saldrá de ahí sin
problema. Lo que sí es cierto es que , ahora, hacer la goma será
más peligroso que nunca.
Apunte
El regreso de Gilvan puede ser
un interesante revulsivo para el final de temporada. Llama la
atención que el entrenador de Anna apenas ha podido disfrutar del
brasileño: el año pasado lo tuvo un par de meses entre su llegada
a Huesca y el fichaje del extremo por el Hércules mientras, en esta
temporada, no ha podido contar durante cinco meses por la lesión de
rodilla.
