Otro triunfo por la mínima que es bienvenida porque nos coloca con 28 puntos en 11 jornadas, pero que sigue dando para comentarios que no se apagarán con este 1-0, que es la cuarta victoria consecutiva con este marcador. El equipo se está configurando de una manera tal que los rivales tienen problemas acuciantes para provocar verdaderos sustos al cancerbero Falcón, quizás unos lograrán alguna oportunidad más de la cuenta, otros menos. El Córdoba CF plantó un partido serio pero sigue siendo víctima de esa poca capacidad ofensiva que, afortunadamente para ellos, se potencia con un buena red defensiva(que al igual que el Hércules no necesita poner muchos defensas, basta una buena organización desde los delanteros al defensa cuando no se tiene balón) que también le permite encajar pocos goles. La ausencia de Charles pudo ser importante porque Patiño y Pepe Díaz apenas crearon un peligro serio. La clave, sin duda, fue la expulsión de Fuentes que obligó a estructurar el equipo andaluz.
El juego con el balón, de centro del campo hacia delante, bajó en comparación con otros peligros. La apuesta por no sacar un nueve de referencia hizo perder 45 minutos y con ocasiones que llegaban a cuentagotas: una falta de Calvo que Abel Aguilar no logra que el balón entre en la portería; luego, Adrián Sardinero tiró al portero y, por último, Tiago Gomes casi rozó el esférico en un centro por la izquierda y que no logró conectar. La red cordobesista cortocircuitaba a la terna de Tiago-Abel y Rivas. No había mucha claridad en el juego ofensivo local. En la segunda parte, la expulsión del lateral izquierdo aportó mayor sensación de peligro pero fue la entrada de Urko lo que permitió concretarse de verdad. Así, en su primera ocasión remató fuera en un saque de esquina; luego Carlos Calvo tiraba desde la frontal sin peligro. Las ocasiones, sin mucha claridad iban llegando a la portería de Alberto. La jugada del gol obliga a dar el mérito absoluto a Abel Aguilar al robar el balón, otra parte a Felipe Sanchón por ver claro que el pase de la muerte iba a ser ejecutado a la perfección por Urko Vera que toca lo suficiente para marcar el 1-0. Aunque el Córdoba rondó la portería con diez, el peligro sólo llegaba de verdad con el tímido remate de Pepe Díaz, el 2-0 era más factible. Tiago Gomes sacó una falta desde la frontal que se fue por encima del larguero. Urko, al final del encuentro, tuvo otra ocasión pero la definición no fue buena. El triunfo permite un octubre idílico con seis triunfos en otras tantas jornadas. El juego no es el deseado y se echa de menos algo más de valentía sacando un nueve de referencia como se hizo con Aganzo.
Apunte: Trece tarjetas amarillas en un partido que no fue para tanto. Obviamente, con tal cantidad de amonestaciones, alguno sería expulsado y ese fue Fuentes, del conjunto cordobesista. Con todo, ayer se comprobó que el problema no es la unificación de criterios de los colegiados…sino de un mismo árbitro a lo largo del partido. Y no olvidemos que Abel Aguilar o Tiago rozaron la expulsión según la manera de mostrar tarjetas por parte de Pino Zamorano.