Aunque, a estas alturas, parece que todo indica que Abel Aguilar no será vendido según “Ràdio 9”, indicado por el mismo periodista que había destapado su posible venta, ello no obsta para mostrar cierta preocupación por otros problemas económicos que el club tiene y que siguen suponiendo una constante sangría a las arcas. Por un lado, los intereses del préstamo que concedió el Instituto Valenciano de Finanzas, por otro el importe de la indemnización por la incapacidad que sufrió Nano cuando se lesionó en aquel verano de 2005, tras el ascenso y que se refiere a unas bases infravaloradas para cuantificar la situación incapacitadora. Tres hechos que han supuesto otro varapalo económico y que se unen a otros tantos deslices de los que ya es imposible pensar que es mala suerte y sí en una gestión carente de sentido común: errores en contratos(Bautista y no avisar al Recreativo de Huelva), dejadez a la hora de exigir las debidas indemnizaciones(asunto Mandiá y su marcha al Racing), asuntos de comisiones e intermediadotes, etc. Imposible cuantificar cuanto desastre se genera por no olvidar del tema con Hacienda y los innumerables embargos, intereses de demora, sanciones han hecho que el dinero se haya ido por donde no debía.
Ya no es un tema de que Ortiz esté detrás o no. Poco importa que se “marchara” en mayo, “volviera” en septiembre porque el problema son las deudas pendientes que la forma de gestionar ha provocado y que siguen lastrando el futuro del club. Auténtico caos que los interventores se han encontrado y que vienen de un pasado, a veces lejano (el asunto de Nano llevaba su tiempo), a veces cercano en el tiempo(esa deuda de 1,5 millones por la compra del 50% de los derechos por Abel Aguilar con el Udinese o el asunto de los intereses del préstamo). Problemas que extienden las dudas por el futuro que le espera al Hércules, a la espera de que salga otra historia, otra deuda de la que no se sabía nada y que irrumpen para dejar helada la sangre de los herculanos. La labor de saneamiento que requiere el club, porque llegará un momento en que no tendremos el colchón del procedimiento concursal, es imprescindible porque otro asunto amenaza al club cuando el procedimiento sancionador en la LFP se lleve adelante, dentro de unos años(2014/15), y se exija algo más que un buen rendimiento sobre el terreno del juego para poder inscribirse cada año en la Liga Profesional.
Apunte Si ya sorprende la situación que se está dando en Cartagena con el club dirigido por Francisco Gómez. Ningún punto, segundo entrenador y, sobre todo, un terreno de juego en un estado harto preocupante que está afectando el rendimiento del conjunto local. Cuando empieza a sonar la trayectoria del año pasado del club tinerfeño, es que las cosas van mal.