Este Hércules nos ofrece varias caras, la ofensiva y la que sabe defenderse bien. Si no consigue llegar fácil y con oportunidades varias, también logra que el rival no tenga tan fácil acercarse hasta las inmediaciones del portero Calatayud. Así, el empate a cero podía estar servido durante largo tiempo por la mala suerte de unos y la escasa claridad de los otros. El empate pudo tener una interpretación basada en la diferencia entre un exento en copa contra otro que se las tuvo con un buen equipo como el Girona. El Hércules no conseguía la frescura deseada y que, posiblemente, le habría dado una victoria que en la Nueva Condomina tenía que llegar en esta ocasión. El resultado fue justo pues también habría que contar con un Real Murcia que le ha dado los galones muy rápido al chaval de Aquino. Porque el Real Murcia no le veo arriba por mucho que se esfuercen. Ni Dialiba es un figura, ni Despotovic decanta resultados-siendo cruel hasta podría decir que me recuerda aquel infausto fichaje de Osterc- y, como he dicho, Aquino aún está verde cuando se enfrenta con centrales con veteranía. Calatayud apenas tuvo trabajo y pocas paradas de mérito se recuerdan pues la mayoría iban a su cuerpo. Tampoco Elías. Es más el peligro llegó rondando con dos centros que, de tocarlos, habrían entrado en la meta murciana pero en los que no hubo suerte. De lo demás…
Porque el juego de ayer no fue del todo bueno. Son partidos que se suelen llamar “jugar de oficio”, “jugar práctico”. El empate sabe bien por lo que supone la séptima jornada sin perder (récord desde el regreso a 2ªDivisión, diez jornadas si además sumamos las de la última temporada), con un buen balance defensivo(once goles de la temporada pasada por cuatro de ésta) y con el triste hecho de seguir sin contar con Delibasic y ayer tampoco sin Abel Aguilar. También hay que reconocer que el equipo en varias jornadas lo va a pasar mal. Ser líder hace que el rival se motive más y eso cueste más para la victoria y más si hay problemas en la delantera pero no es difícil recordar partidos malos en el año del ascenso…y se logró. Ayer no fue un encuentro bonito, sí que fue emocionante con algunas que otras oportunidades, pero con poca idea y mucha imprecisión hasta que saltaba la chispa y la jugada se convertía en oportunidad.
Apunte Por una vez me desvío del fútbol para ir a la Fórmula 1 y celebrar la segunda victoria consecutiva de mi tocayo. Una victoria que me alegra pues acentúa mi convicción desde el gran Premio corrido en Montmeló de que el equipo iba evolucionando y sólo la mala suerte tanto de pilotos como alguna que otra rotura impedían mostrar ese salto que estaba dando Renault en las carreras.