La eterna canción

Como cada 31 de julio, el Hércules ha aparecido en la enésima lista de equipos que deben dinero a los jugadores que lo han denunciado ante el sindicato de futbolistas. Al parecer, se ha resuelto el tema mediante la entrega a la AFE de los pagarés que los jugadores no aceptaron en su día (Diario Metro) pero ello no obsta para no dejar de comentar un asunto en el que se está demasiado metido y que, por tanto, no hay propósito de enmienda. Sin embargo, quisiera no hacer de este asunto una crítica hacia el máximo accionista pues es un tema en el que cada uno de los dirigentes que han presidido el Hércules en los últimos años se han visto salpicados. La relación entre el Hércules y las denuncias de los futbolistas viene de lejos. Por ejemplo, en la 89/90, el club debía 23 millones y sin apoyo político por parte de la alcaldía pero se resolvió gracias al apoyo de los aficionados; un año después, la deuda era de 32 millones. En otras temporadas, las deudas fueron inferiores, casi nimias hasta que llegó 1999 en la que la deuda se resolvió gracias al apoyo del canal autonómico. El año 2000 fue dramático, llegando a lograr una prórroga por parte de la AFE para decidir si era correcta la solución llegada desde Alicante. Otro mal sabor tardaría tres años más tarde cuando un 31 de julio, a las 5 de la tarde, el informativo de la Cadena SER anunciaba que el Hércules era uno de los candidatos al descenso, justo el año de la llegada de Subirats-al día siguiente, Enrique Carratalá tuvo que disculparse y comentar que fue un problema de trámite que había hecho que sonara las alarmas. En esta temporada que ha acabado, la cantidad era de unos doscientos treinta mil euros por 9 denuncias. Pero, como en el año pasado, se ha solventado a última hora.

Este no es un problema que afecte solamente al Hércules. Muchos son los equipos que se han visto atrapados en este asunto y han visto como el descenso administrativo rompe con todos sus planes, o peor aún, han acentuado el dolor de un fiasco deportivo. Ejemplos hay de todos los colores: el Burgos en la 81/82(acabó en desaparición), Almería(82/83),Alavés(85/86) o aquel Orihuela que acabó 5º en la 90/91 descendió por impagos. Durante un buen período de tiempo, el descenso acababa acechando a equipos de tercera división. En aquel verano de 2000, el Hércules se salvó pero no así el Manchego, el Mérida o el Logroñés-el equipo riojano regresó a los abismos en el 2004-. El Granada CF(2002), Real Oviedo(2003), el Compostela(2003), Badajoz(2006) son algunos de los equipos con cierto renombre que se han visto obligados al descenso de categoría. En el caso del equipo asturiano, el descenso administrativo golpeaba a una entidad que había descendido en el terreno del juego, lo que podría ocurrir esta temporada en el caso del Extremadura. Los motivos para entender esta situación son difíciles de entender pues, en cada caso, confluyen temas como una mala campaña deportiva, una crisis institucional- social o económica- pero el principal es vivir por encima de las posibilidades, si bien la suerte podría haber influido si los resultados deportivos hubieran cundido. Los clubes han buscado quitar el descenso por impago pero es difícil lograrlo pues la AFE considera que es una opción de presión que, de desaparecer, dejaría más indefensos a sus representados.

Apunte Motril será la ciudad que el Hércules visitará en la primera jornada en la que los alicantinos salgan del Rico Pérez y jueguen a domicilio. Tiene sus cosas buenas( un poco la inestabiidad social sufrida desde junio y las dudas acerca de los abonados) y malas( no se puede negar la ilusión del rival en su estreno en casa).