martes, julio 03, 2007

Animaciones diferentes

La noticia que ha salido en el Diario Información, acerca de la decisión del club de comunicar los nombres y fotos de los que participaron en el uso de bengalas, lanzamiento de botes de humo o el disparo de un petardo en el pasado derby, ha levantado ampollas entre aficionados de las diferentes gradas. Los eventos acontecidos tuvieron incluso la paradoja de que el petardo estallaba a escasos metros de la portería defendida por el cancerbero herculano Sergio Aragoneses. El Hércules, quizás motivado por tener que estar respondiendo constantemente por las multas, ha decidido que ya no se podía admitir más y ha enviado la información a la Comisión Antiviolencia. Ello ha generado enfado en un cierto sector de la afición que se coloca en el fondo norte. El club ha apostado que otra manera de animar puede ser posible.

La verdad es que Inglaterra, símbolo antaño del vandalismo -aquella dura sanción de cinco años a los equipos ingleses por lo acontecido en el Estadio Heysel les vino bien- ha cambiado de tono. En los últimos tiempos, el Liverpool ha destacado por la faceta de todo un estadio animando, el Manchester United ha convertido Old Trafford en un fortín recurriendo a una animación persistente. El problema principal que ha tenido las animaciones es que hace unos años esa manera de “crear ambiente” (bengalas, botes de humo,etc) estuvo bien vista y nadie reclamaba por otros temas. El evento ocurrido en Sarriá(sin olvidar de que no estamos hablando del mismo tipo de bengala) en aquel marzo del 92 asustó con motivo a administraciones públicas por lo que decidieron reducir hasta el mínimo el uso de dichos artificios. A falta de estos materiales, la mayoría de aficiones apostaron por dar color a los estadios(tifos, mosaicos) para animar a sus jugadores y crear ese miedo escénico a los rivales. Ese ha acabado el modo idóneo de animar, darle ese toque positivo de color que ayude a los jugadores ha lograr su objetivo.

Se critica, quizás con razón, que la afición herculana es fría, que no anima hasta que ve que el marcador está a favor pero eso tiene un matiz: como la mayoría, anima cuando recibe de sus jugadores algo con el que ilusionarse: mostrar carácter para remontar, cuando sabe que se juega algo de verdad, etc. Otro factor es el tema de dos años duros en los que se ha visto más para abajo que para arriba y eso influye en el ánimo de los aficionados. Cuando las cosas van mal la crítica atenaza el ánimo y eso se percibe en los aficionados; por el contrario, la alegría facilita la animación y, sobre todo, la imaginación.

Apunte Supongo que la primera pregunta al nuevo fichaje holandés, Kiran Bechan, será como se pronuncia su nombre porque hay combinaciones suficientes como para escuchar su nombre de varias maneras a lo largo de las retransmisiones. Al menos, que se evite que Bechan se una a nombres como Prosinecki, Carew o aquel célebre Líneker, Linéker o Lineker que jugó en el Barcelona allá por el 86.