domingo, marzo 11, 2007

"O ese o yo"(II)

Al tiempo que escribía el artículo del martes en referencia a que no era bueno dejarse llevar por los nervios, Toni Cabot, en su columna titulada "O ese o yo" en el diario INFORMACIÓN, sacaba a la luz el estado de crispación institucional y deportivo que se vive dentro del club. Las críticas del presidente Valentín Botella iban dirigidas al entrenador y al director deportivo. De Subirats dejó bien claro que lo veía diferente a aquel que llegó en el 2003; respecto a Josu Uribe fue más duro; la sensación era que la famosa cinta de marras, en la que el presidente no estuvo afortunado al cometer varios fallos que fueron objeto burla, fue la gota que colmó el vaso de la paciencia del oriolano contra el entrenador. Ese artículo ha levantado polvareda. De repente, todo se está poniendo turbio: se siguen revolucionando los jugadores que están en el ostracismo, el entrenador critica al entorno por alabarle... para después hundirlo y, para colmo, las cifras penden como una espada de Damocles: Uribe debería ganar en Cádiz para mejorar los números de Bordalás en estas siete jornadas en las que ambos técnicos han coincidido con los rivales. A falta del partido de hoy: Bordalás sumó seis puntos(2 victorias, 5 derrotas) en siete encuentros y un balance de goles de -3(6 a favor, 9 en contra); Uribe en seis jornadas suma cinco puntos(una victoria, dos empates y tres derrotas) y un balance de -5(5 a favor, 10 en contra); un empate en Cádiz sólo le haría coincidir en puntos con el técnico alicantino. No estoy pidiendo el mismo destino a Uribe pero sí demostrar que, si continuara, fue una injusticia para el anterior técnico por parte de quien, en su día, mantuvo contra corriente a Granero, y que tuvo que acceder a que Botella cesara a dicho entrenador- no ha vuelto a entrenar desde entonces- pues él no lo iba a hacer. Uribe seguirá y sólo caería si se desaprovechan esos dos encuentros consecutivos en casa. De perder en Cádiz, sólo dependería la imagen que se diera para continuar o para el cese(derrota abultada más mala imagen) pero, lo normal sería su continuidad.

En Cádiz les espera un equipo que debe aprovechar todas las oportunidades que les queden para recortar distancias con murcianos y almerienses y mantener aún vivas esas pocas expectativas de ascenso. En Cádiz son conscientes que un pinchazo con el Hércules podría alejar a más de diez puntos el tercer puesto, a falta del último tercio. Las ruedas de prensa, durante esta semana, en la "Tacita de Plata", siguen dos patrones claros: los tres puntos son más que importantes y que van partido a partido. El Cádiz recibirá a un equipo que necesita los tres puntos para coger algo de confianza para que el último tercio de liga sea más tranquilo. Sobre el once que sacará Uribe se conoce que recuperará la presencia de Farinós algo más adelantado, posición similar a la que usó en algunos partidos de la primera vuelta. Mientras la zaga está siendo la habitual- sólo el cambio es por sanción y no por decisión técnica-, la duda está en como afrontar el ataque, donde se supone que Piti jugará por banda derecha, Moisés de delantero y Calandria a la espera. Como siempre, el equipo debería salir a por el partido y no ceder el balón al Cádiz o, al menos, que se ataque con más contundencia- el Liverpool no tenía el control del balón ante el Barcelona pero la inmensa mayoría de ataques eran ingleses-. Lo terrible sería un partido a por el empate(una cosa es decir que se va a ganar y otra es la manera de hacerlo) y que se hiciera largo esperando el final del encuentro. Hay que jugar con el hecho de que ellos ahora están más presionados porque necesitan la victoria, sí o sí; jugar con sus nervios desde el primer instante y acosar la portería de Armando para ir creando malas sensaciones en la parroquia gaditana.

Apunte Cosas del calendario, los dos próximos rivales en el Rico Pérez jugarán hoy en el Nuevo Castalia. Espero que esté presente alguien del cuerpo técnico herculano para ver a dos equipos con los que se juega buena parte de la temporada(lo suficiente para dejar la permanencia a sólo tres victorias del objetivo).