lunes, diciembre 09, 2019

Quemando etapas

Era de esperar vista la última trayectoria: cesar a un entrenador(al menos, así se había decidido la noche del domingo) que se había desgastado en las últimas seis semanas(tres puntos de dieciocho) y pesaba sobre él algunas decisiones equivocadas de esa pelea en mitad del entrenamiento. La falta de experiencia fue el menor de los problemas de Jesús Muñoz: nunca se le vio controlar la plantilla, nunca supo atinar el juego que desplegaba ni los jugadores que usaba. Si a eso le unimos su estado de ánimo tenemos los elementos del fracaso. Incluso poniéndose 0-1 ayer, la sensación era de no ganar.

Junto a él también parece caer Javier Portillo. No saldrá del club por su situación accionarial pero sí apartarse de las decisiones deportivas. Una parte de la afición le echa en cara la gran parte de culpa de esta temporada a sus decisiones deportivas, haciéndole responsable de algunas tomas erróneas desde derribar al entrenador que había llegado hasta la final del ascenso hasta la elección de Jesús Muñoz como relevo. Viendo que el cese de este técnico era inminente, ya se veía lógico que debería apartarse por estar también señalizado. Desde la pretemporada, la toma de decisiones con los jugadores que llegaron, algunos de la mano del anterior entrenador(por presunción, Ualaloca, Felipe Alfonso), otros de la mano de Portillo(Teo Quintero, Borja, Moha, Alfaro), polémicas de ese verano como el intento de Carlos Martínez de irse, de que no siguiera Jona o el enfado de Chechu tras su marcha.Todo ha sido un continuado desbarajuste. La pretemporada no fue tranquila para que el entrenador hiciera sus pruebas y cada partido se miraba con lupa y eso no ayuda. De hecho, el elogiado Atlético Baleares tuvo tres derrotas en ese período y nadie se rasgó las vestiduras pero aquí, incluso, el partido ante el UCAM ya parecía un examen. Sí, reconocí que acabó desquiciado Planagumà tomando decisiones erróneas pero todo en un entorno de crispación y unas ganas tremendas de cierto sector para que fueran mal las cosas. No es normal un ambiente tan cargado el día del Villarreal B y era la jornada segunda.

Ahora llegaría, con mucha seguridad, Vicente Mir. Una parte de mí se alegra pues nunca se mereció el portazo que le hicieron al día siguiente del Hércules-Cádiz CF en junio de 2016 y que supuso el pistoletazo de dos temporadas tremendas, malas con una sucesión de entrenadores hasta que llegó Planagumà. De hecho, la continuidad del técnico catalán en julio tuvo mucho que ver con reconocer el fallo de ese año 2016 en el que hubo demasiada precipitación. Creyeron, por entonces, que fichar a un entrenador que sube a segunda es garantía de ascenso y el siguiente a Mir demostró que no era así. Escribía que una parte de mí se alegra pero la otra me preocupa: las segundas partes no son buenas y lo que tiene delante es un toro en forma de tercera división, que tiene que evitar. Tras su marcha de Alicante no ha tenido buenas experiencias y eso, en cierto sentido, preocupa: en la primera con el Real Murcia(2016/17) se quedó en la segunda ronda de promoción de ascenso ante el Valencia Mestalla, con una reacción que llevó al equipo a puestos de ascenso desde el 8º al 2º puesto. En Elche(2017/18) duró hasta la jornada 14ª(7 victorias, 4 empates, 3 derrotas) pero, como el RCD Mallorca iba como un cañón, se le cesó aunque Josico no mejoró sus números. Donde si obtuvo números que preocupan fue en Alcoy, la temporada pasada, donde fue cesado con unos números de play-out(6 victorias, 11 empates, 9 derrotas) pero que lo único que lo pueda salvar es que el equipo no estuvo afortunado. Es, quizás, el único episodio de Mir que no me termina de convencer. Con todo, espero que sea el último entrenador por esta temporada aunque sé de alguno en los medios de comunicación que no habrá recibido la llegada de Mir como una buena noticia.

Apunte. Si pésima es la trayectoria del equipo herculano, la del conjunto herculino es devastadora (12 puntos de 57 y necesidad de hacer un sprint espectacular(38-40 puntos de 69 en juego). Si los descensos del RCD Mallorca y Elche fueron tremendos en 2017, lo que apunta 2020 no le anda a la zaga(20º Racing, 19º Tenerife y 18º Málaga CF).