Irónicamente, aún con la alegría de la victoria y los tres puntos, fue el partido del que salí con menos ánimo de la temporada. Algunas de las virtudes que vi en otros partidos no las encontré ayer. Estoy de acuerdo que se han perdido/empatado partidos mereciendo más y "uno por otro", era justo que se ganara alguna vez cuando no se mereciera.
Ayer, el conjunto aragonés salió con intención y ya puso a los de Planagumà con tensión en las primeras jugadas a balón parado que tuvo que atajar Falcón porque el 0-1 rondaba. De centro del campo hasta al ataque, la imprecisión era habitual con un protagonista: Pol Roigé estuvo apagado, Adrián y Nieto no eran estiletes en la banda y, por último, Carlos Martínez y Emaná no recibían fácil el balón. Rondó el 0-1 varias veces, no con claridad meridiana pero sí insistencia. Pero llegó una jugada en la que Emaná contacta con Andriu que queda en el suelo, siendo atendido fuera del campo, tras señalar el árbitro la falta. Un minuto después, con uno menos, llegó el pase de la muerte de Emaná a Carlos Martínez en la primera jugada de serio peligro. Aunque los visitantes siguieron con el control del balón, las llegadas al área de Falcón eran menores que en los primeros minutos. Al borde del área llegó el segundo golpe con un cara a cara de Chechu que resuelve bien y materializa el segundo gol del partido y sentenciando un partido en el que las oportunidades cayeron del lado aragonés y el acierto por parte blanquiazul.
En la segunda parte, el partido se tornó un poco más aburrido de lo normal. Por un lado, los visitantes buscaron marcar el gol que les pusiera en el partido de nuevo pero Falcón no tuvo tanto trabajo como en la segunda parte; por el otro lado, el local, el juego siguió siendo espeso y carente de acierto ante puerta. Salvo esos minutos de inquietud con el jugador del SD Ejea en el suelo, la segunda parte fue decayendo y, únicamente, al final, se pudo ver alguna opción que otra de ver el 3-0 pero Carlos Fernández siguió su desacierto ante portería en un continuado "suma y sigue". Con el final del partido, se pudo salir del estadio con tres puntos que, por ejemplo, se llevó el At. Levante en la jornada 7.
Dentro de unos días se jugará en Sabadell un partido que determinará el futuro blanquiazul contra uno de los que yo veo aspirantes a entrar en promoción.
Apunte. El partido de ida de la final de la "Libertadores" se jugó al día siguiente tras caer el diluvio en Buenos Aires. El sábado pasado hizo calor...más bien, "bochorno" por lo visto en el recibimiento del autobús del Boca Juniors al feudo del River Plate y que obligó a otro aplazamiento y la amenaza de un partido en terreno neutral.