viernes, noviembre 28, 2014

La cara y la cruz de una cifra.


Aunque ya había visto ese dato a lo largo de esta semana, he decidido darle la debida cancha porque una cosa es positiva(pero no mucho) y la otra es preocupante. Salía la media de 4.642 espectadores como la cifra más alta del grupo tercero de 2ªB, lejos del Real Oviedo que está en una cifras envidiables para un club(12.860 aficionados), que en su día estuvo en primera pero que lleva una década entre 2ªB y tercera división. En sí, es una cifra que recalca eso de los “5.000 de siempre”, los herculanos de verdad, los que están ahí en cualquier categoría.

Las cifras absolutas están ahí pero el verdadero dolor es ver el porcentaje de aficionados en función del aforo. El problema está en ese aproximado 16% del foro utilizado en el Rico Pérez. Aquí no entra la mutilación realizada del estadio, aquí poco importa que haya dos gradas vacias por decisión de “arriba”, que el fondo norte esté en uso en la parte inferior. La cifra porcentual es suficientemente clara para decir que se ha perdido mucho. Muy lejos del estadio están aquellos que iban en primera división y que no han querido volver, igualmente los que iban al estadio en segunda división. Sólo un 16% de valientes que ven partidos con rivales con un nombre que poco se veía por estos lares. Culpables hay de ello: desde la dirección del club hasta el afán elitista de buena parte de la sociedad alicantina en lo referente a lo deportivo.También es justo indicar el poderoso enemigo que es el “sofa”. La televisión ha lastrado muchos aforos. Ahora duele ver hemerotecas de, por ejemplo, la temporada 90/91 y ver que había más de diez mil espectadores en partidos medianamente importantes.

Respecto a otros equipos, llama la atención el 80% del aforo de Son Malferit por parte de aficionados del Atlético Baleares. Es un porcentaje impresionante pero con, cierta trampa. El conjunto balear, siendo el segundo equipo de la ciudad de Palma de Mallorca, jugaba en un estadio de cerca de 15.000 espectadores, el Estadio Balear. La afición sigue pero el aforo disminuye y eso permite esos porcentajes. Salvo el Valencia Mestalla, la mayoría de filiales están en la parte baja de la lista en función del porcentaje. En parte, porque los filiales no permiten un fácil visionado ya que hay que ir a las ciudades deportivas que, en algún caso, exigen medios de transporte que algunos campos no necesitan.

En cierto sentido, a pesar de este liderazgo casi por obligación, envidia pura por aficiones que acuden a sus estadios en gran número: cerca de 8.000 en Cádiz, 12.500 en Oviedo o, incluso, los casi 7.000 de Murcia que, con el verano que han pasado y con el estadio en el quinto pino, tienen un mérito impresionante.

Apunte Con media ampliación realizada de las dos aprobadas en noviembre de 2013(independientemente de la de Valentín Botella), la cantidad a aprobar en la próxima junta general ordinaria de accionistas del club blanquiazul está en 2,3 millones de euros. La duda será saber cuando se llevará a efecto, aunque lo normal es que sea antes de junio.