Por azar del sorteo, esta semana espera una doble sesión de morbo para ver cómo acaban ambos encuentros, ante el Numancia y el Albacete. Mañana miércoles, Andoni Goikoetxea se encontrará con el equipo en el que entrenó en dos períodos diferentes con buen resultado-en este caso, el verdadero morbo se daría cuando el entrenador vasco acuda a Soria y se encuentre con sus aficionados-; también para varios jugadores será un duelo especial por haber jugado en ambos equipos-Montenegro y Diego Jaume en el Hércules y los jugadores Toché y Carmelo por parte soriana-. No contentos con ello, el domingo espera un equipo con el que no se mantiene una rivalidad como con otros equipos (Real Murcia, Elche, Valencia) pero la cercanía no niega que hay cierto interés que se acrecienta con la presencia de Pablo Calandria en la delantera y de Quique Hernández en el banquillo manchego en lo que será el reencuentro del técnico de Anna con la afición herculana tras aquel lejano Hércules-Lleida de la temporada 97/98 en el que la grada decidió su futuro, aunque luego hubo que esperar unos pocos días para confirmarse el cese. Con todo, el morbo con el Albacete Balompié tiene un episodio por encima de otros: el regreso de Álvaro Cámara tras una temporada para olvidar y con aquellos comentarios del jugador en la previa del encuentro en el Rico Pérez.
Estos encuentros tienen una motivación extra si bien el modo de salir es la que termina de darle o no cierta importancia al morbo de un regreso. Así, podemos ver desde los aplausos que recibe un jugador tras realizar una buena trayectoria- por ejemplo, cuando Rodríguez regresó con el Rayo Vallecano y fue recibido con aplausos y gritos pidiendo el regreso-; luego está el “ni chicha, ni limoná” en el que el jugador regresa ante la indiferencia del público( muy posiblemente el caso de Calandria o el de jugadores que no destacaron en su día en un club); por último, se encuentran jugadores del estilo “Figo”, “Moisés” o “Carlitos” (en los dos primeros casos, por supuesta “traición”, en el tercer caso por su constante actuación desestabilizadora dentro de un vestuario). Es en este último caso cuando se espera un encuentro caliente en todos los aspectos. En estos dos encuentros que nos esperan,no habrá tensión y por eso se ganará en mejor atención al fútbol sin que nada extradeportivo acabe afectando al espectáculo.
Apunte Lo que aconteció en el Camp Nou se puede catalogar como indigno de un colegiado internacional: pitar penalti en una jugada donde el propio cancerbero salió herido y, luego, con un 2-1 en el marcador, consideró válido un disparo que dio en el larguero pero que no entró. Nadie en el Barcelona se había dirigido al colegiado y a sus asistentes porque eran conscientes de que el disparo no superó la línea de meta.
