domingo, mayo 27, 2007

Una victoria con sabor diferente

El triunfo de ayer en el Nuevo Zorrilla no es una victoria cualquiera. Es un resultado que, dentro de una temporada atípica y con pocos momentos de ilusión, al menos permite finalizar esta 2006/07,a la que muchos aficionados casi deseábamos que acabara algo así como tres meses. Quizás el triunfo hubiera tenido más relumbrón si el Hércules hubiera roto aquella racha de imbatibilidad que ha llevado al Valladolid a alcanzar el ascenso por méritos propios mas el Almería y el Castellón habían logrado ese “éxito” antes. Aún así, este triunfo ante un equipo sin incentivo-el objetivo lo habían cumplido hace un mes- tiene su dople peso: ganar al líder en su casa y romper esa estadística que marcaba que el Hércules no había vencido en tierras del Pisuerga desde hace 41 años. El Valladolid puso su empeño en lograr el empate tras una semana en la que el entorno había dicho que ya era demasiada la desidia: tras el ascenso, dos empates y dos derrotas-ahora tres después del triunfo alicantino- están restando algo de brillantez a una temporada histórica. Además, el triunfo llegó de la mano de un Sendoa que empieza a demostrar a los aficionados que sería un jugador válido para el próximo año.

La victoria tuvo su valor y eso sería bueno que nadie se lo restara. Estos partidos, de ganarlos, sirven para “salvar” temporadas; es decir, que una de las pocas cosas buenas que se recuerden de esta temporada será este 0-1 en el feudo pucelano. Sí, es una manera quizás un poco cruel de reconocer que la temporada ha sido casi para olvidarla-sólo unas escasas semanas de ilusión por el ascenso-, que apenas se han logrado resultados dignos de ser recordados-de esta temporada quedará esta victoria y la doble ante un Xerez que no cae precisamente simpático- y que un triunfo así permite al herculano, al menos durante un tiempo, sentirse contento porque su equipo ha vencido a un grande de la categoría que, por cierto, no ganado a los herculanos en ninguno de los dos encuentros. Ahora, a falta del encuentro entre el Castilla y el Tenerife, el Hércules se mantiene casi matemáticamente en esta categoría de plata: en el mejor de los casos, se podría permitir el lujo de perder los tres encuentros y que los gane el filial merengue con buenas goleadas pues el margen es de unos 14 goles a favor del Hércules(+1 de los alicantinos por -13 del Castilla); en el peor, aún quedan dos encuentros ante rivales condenados al descenso a 2ªB, sin ni siquiera un incentivo económico ajeno, y vencibles. En definitiva, el próximo domingo se puede estar viendo un partido sin más presión que buscar esos 60 puntos, más por ilusionarnos que por otra cosa. Eso sí, dentro de tres semanas llegará el ansiado derby ante el Elche y esa puede ser otra jornada para lograr esa otra victoria con sabor diferente: la de la venganza por la derrota en el Martínez Valero. Pero eso será otra historia.

Apunte En Primera, la lucha por el título puede ser de órdago: si Real Madrid y Barcelona cumplen sus penúltimos obstáculos respectivos se espera un emocionantísimo día: Real Madrid-Mallorca y Nàstic-Barcelona donde el título puede variar con el paso de los minutos. Mientras tanto, bermellones y tarraconenses esperan los “maletines”.