viernes, enero 25, 2019

Ser iguales

El pasado martes vivimos un espectáculo único. Alicante había recibido a varias selecciones para enfrentarse contra el combinado nacional pero, salvo Inglaterra, el resto eran selecciones de nivel inferior o parejo(en el momento en que se jugó el partido). Sin embargo, hace tres días, llegó la selección de Estados Unidos, tricampeona del mundo(1991,1999 y 2015...aparte de disputar todas las semifinales de los siete mundiales disputados) y vimos un estadio con un tercio de aforo(tampoco se pretendió más cuando no se abrieron Tribuna Alta y grada del Mundial 82) y celebrándolo como una gesta que, esperemos, le quede poco y se vaya superando más y más. Alegría y tristeza al mismo tiempo, pues no comprendo que "si gusta el fútbol", se tire por la borda una ocasión histórica mientras se llena para un vulgar España-Albania. No entro en alguna frase que otra desagradable leída el pasado martes, me pregunto por esos 20.000 aficionados de diferencia entre el partido de Albania y de Estados Unidos,¿dónde estaban?. No. Ni me menten el pavoroso frío gélido del martes porque les hubiera importado muy poco si hubiera sido la selección masculina. Reconozco que las jugadoras sean menos conocidas, porque el público se va haciendo con los nombres gracias a las retransmisiones de Gol, pero era una oportunidad difícil de ver en un futuro. Quizás, la selección femenina si vuelva a Alicante pero la tricampeona no.

Como tal, el partido fue bueno e interesante. España jugó bien, quizás falto de pillería y sobrado uso de pases para conectar con la jugadora que ocupaba el puesto de ariete. Por el contrario, el combinado norteamericano jugaba abierto y, sin costarle nada, llegaba con ideas claras para llegar a las inmediaciones de la portería de Sandra Paños. Fue justa la victoria pero queda pensar que la jugada anterior al 0-1 pudo ser el 1-0; después del gol, llegó un constante peligro. Para la anécdota, queda el recuerdo de una decisión de Vilda, en un saque de esquina, de poner a tres jugadoras en el centro del campo.

Queda mucho camino por hacer, también es cierto que se ha ido recortando distancias; de hecho, me sorprendo por los éxitos de las selecciones inferiores de España cuando la selección española jugaba, en 2015, el primer mundial femenino de su historia. Acabaron con un empate y dos derrotas pero, cuatro años después, la alternativa factible de quedar tercera(y dentro de las cuatro mejores en ese puesto) al juntarse con Sudáfrica, China y Alemania(bicampeona). Se dieron pasos en su día. Pienso que fue fundamental que los equipos emblemáticos de fútbol español tuvieran su sección femenina. Así, en 2001/02 estaban como únicos referentes el RCD Espanyol, Levante U.D. y C.d'E. Sabadell, mientras la temporada actual tiene a doce equipos de dieciséis que disputan la primera división asociados a esos clubes masculinos...y aún falta que se incorpore el Real Madrid para el definitivo empujón. Se van retransmitiendo partidos de forma periódica-aunque lastimosamente, a veces, se tenga que pagar al medio de comunicación por informar de algo-, se va incorporando algún partido que otro para la quiniela.

Quedan temas pendientes pero en los que es fundamental el apoyo de la gente. Es decir, no se puede hablar de igualdad entre futbolistas hombres y mujeres cuando el precio de uno llega a 60 €(se llena) y otro a 10€(no llega a un tercio de aforo); no se puede hablar de igualdad cuando cuesta la misma vida, por ejemplo, llenar "Divina pastora"(y estamos hablando de 300 espectadores de aforo) cuando no debería costarle llenar, como mínimo, el estadio de atletismo(con sus incomodidades, que también es cierto, aforo 2.685 espectadores). No escribo únicamente de fútbol. En el caso del balonmano femenino, era triste ver que no se llenaba el Florida-Babel para un partido de competición internacional...y con acceso libre. Por eso considero fundamental el apoyo de la gente para que apoyen también económicamente los proyectos de deporte femenino. No esperen a grandes marcas apoyar de forma cuantiosa si no ven ese apoyo pasando por taquilla.

Apunte Vamos a sufrir mucho en el tenis cuando se marche Rafa Nadal.Su carrera meteórica está al nivel de otros gigantes de otros deportes.Un periplo con un palmarés extenso y un puntito de mala suerte con las lesiones que le ha impedido mantener el número uno de la ATP más tiempo.