Esto de las pretemporadas es así. Oyes una derrota de tu equipo y observas como otros se regodean en ello…hasta que ellos pierden igualmente. Por ejemplo, debido al tema Kiko, estaba prestando atención a los resultados del Cádiz y observaba como perdían con un regional preferente o les costaba marcar goles; el propio Alicante también perdía pero a una derrota de ellos había otra nuestra. Perder contra un equipo de categoría inferior siempre es duro por todo lo que implica. Poco importa que el equipo presentase a los suplentes o no estuviese afortunado delante de portería-siempre me acordaré de una crónica en la que el Polideportivo Ejido perdía uno a cero en Segovia después de estampar cuatro veces el balón en el poste- y el rival ,sí. La motivación del rival es tal que realmente es más peligroso que un equipo más puntero porque juega sin presión, dando por hecho que la derrota es lógica y, a partir de ahí, es un logro mientras que el equipo de superior categoría, si gana, no ha hecho nada de especial pues era lo lógico y evidente.
En principio, esta es una época en la que los resultados poco importan…pero sin pasarse. La escandalosa derrota ante el Villarreal B dejó los cimientos de la campaña de abonos temblando como si fuera un terremoto de grado 5 en la escala Richter. Ese el verdadero gran peligro que acecha a una mala pretemporada: alejar a los indecisos del hecho de abonarse-sólo los fieles a un club no dudan-, a esos poco les puedes decir que el equipo puso en liza al segundo equipo con la excepción de Sendoa -si es que Tuni tiene prioridad en la banda izquierda- porque te dirán que, de todos modos, debían de ganar…y llegas a la conclusión de que no le puedes decir nada y que, casi, tienen la decisión tomada. Ahí es donde echas de menos un partido ante un equipo de superior categoría para que la motivación caiga de nuestro lado y si el resultado es bueno, convencer al dudoso. Hoy se juega ante el Lorca un encuentro que tiene una importancia mayor de la deseada: tras perder ante Águilas y Villarreal B, otro trompazo sería indeseable con visos a la presentación ante el club “orellut”. No estaría de más que el club diera un toque de atención a los jugadores y recordarles que una cosa es perder con decoro, otra haciendo el ridículo y luego está la victoria como único remedio que haga olvidar lo de estos partidos y que han esfumado la buena imagen ante el Tottenham.
Apunte Dos comentarios a indicar en relación a este blog: el primero es que no habrá artículo hasta el próximo domingo, cierro por vacaciones; el segundo, es que, a la vuelta, se añadirá un nuevo artículo que posiblemente se publique los lunes- a partir de septiembre- y que formaría parte de una colección llamada “Un Hércules de Primera”.