Está claro que el tema económico
es relevante para hacer mejorar la cuestión deportiva. Un dinero que parece que
llegará, de ser cierta la noticia de la falta de recursos económicos del
club, de la mano de los que están ahora
en el club, aunque sea dejando una marca en la cuentas del club como deuda.
Ojo, entendible a todas luces. Creo que sería de ingenuos pensar que alguien
está en un club de fútbol para que sea un fondo perdido de dinero. Se
reprochará que hubo una ampliación de capital sin llegar a cubrirse(ojo, no
sólo por Enrique Ortiz, que la aportación de otra gente apenas llegó a 6.000
euros) en la que el constructor suscribió 745.000 euros. Ya en la segunda
ampliación, la que quedaba realizar en 2015, fue de 288 euros. Una cifra
ridícula en plena vorágine contra el constructor. Siendo justa la crítica,
siendo lógico que la gente gritara aquello de “Vende y vete”, era absurdo
exigir que acudiera a la ampliación de capital(sí, más acciones y, por ende,
más poder que, en este caso, sería “moral”) a aquel que no se le quería ver ni
en pintura. El resultado dantesco fue ese: ni Ortiz quiso suscribir acciones ni
los aficionados tampoco. En ese momento comenzó a surgir el tema de aportaciones
en forma de préstamos que, por cierto, se dieron a conocer al final de la
temporada por la decisión de la operación acordeón que, entre otras cosas,
transformaba en acciones aportaciones por 170.000 euros.
La pena es que aquí se pide mucho
pero no se hace nada. Hace unas dos semanas, una persona afín a una plataforma
alentaba,en un tuit llamativo, a abonarse al equipo de fútbol sala del Hércules
San Vicente porque eso supondría “más presupuesto y más equipo”. Entonces, ahí,
uno piensa lo injusto de pedir mejor plantilla sin pasar por taquilla.
Apunte: Creo que hay errores que el silencio y el tiempo
deben dejar pasar. Uno de ellos es la alineación indebida del Real Madrid ante
el Cádiz, un fallo que debió acabar con un simple “Me he equivocado”, alguna
queja al sistema de notificación y poco más.Que el tiempo pase y se olvide el fallo. Las resoluciones del Comité de Competición y Apelación son suficientemente graves como para
pensar algo positivo del TAD.