Se sabía que se iba a sufrir y bien. Las noticias a lo largo de la semana recordaban que la visita a las Islas Canarias iba a ser compleja para esperar los tres puntos. Durante cuatro minutos esa posibilidad existió mas un misil de David García impidió una victoria, quizás excesiva para mérito del Hércules. El empate fue justo en un encuentro sin rumbo fijo. Comenzó explosivo el conjunto local; a los cinco minutos el Hércules salía de su “cueva” para tener alguna que otra ocasión para colocar pronto el 0-1 como en Valencia. El tímido remate de Sendoa y otro más peligroso de Rodri aventuraban un dominio herculano de principio a fin pero se volvió a la inercia inicial hasta el descanso. En ese tramo el conjunto canario mereció mejor suerte y a punto estuvo de materializar en varias ocasiones el dominio, sobre todo en un balón que iba camino del poste sin que nadie terminara de poner la bota en el momento adecuado. En otras ocasiones, Calatayud resolvió con más o menos problemas los peligros procedentes de los Pablo Suárez o Marcos Márquez. Lo más preocupante era la escasa capacidad de llegar hasta arriba por parte de los jugadores herculanos. Tuni desaparecido, Rubén lento(aunque entendible en un jugador que jugaba los primeros minutos de titular) y desacertado Tote.
El descanso dio nuevos bríos y el gol de Farinós era el premio al constante acercamiento de la delantera y la segunda línea. Tanto Tuni como Rubén Navarro tuvieron en una misma jugada la opción de colocarse 0-1 pero tuvo que llegar un penalty para convertir el 0-1.Sin tiempo para estructurarse para esta nueva situación llegó el empate. En el enésimo toque de puños del cancerbero herculano, el balón llegó a la puntera de David García que, de efectivo golpeo, lo colocó por toda la escuadra. Luego fue media hora de sincero sopor. El Hércules se encontró con el deber de volver a recuperar la ventaja adquirida pero no lo lograba mientras que la renacida Las Palmas volvía a atacar con el entusiasmo del empate. El guarismo en el marcador no se volvió a mover más en lo que quedó de encuentro a pesar de la repetida jugada del gol que, en esta ocasión, no se volvió a repetir mientras el Hércules, sin Rubén Navarro ni Tote-por desacertado que estuviera, fue el responsable del penalty a favor-se perdió un poco la referencia de ataque.En determinados momentos, este equipo me recuerda a aquel de Quique Hernández tras el ascenso…y la marcha de Eduardo Rodríguez: juegan bien(al menos el día de la Real Sociedad) pero les cuesta un mundo marcar más de un gol tras la ausencia de Delibasic. Ojalá vuelva aquel Rubén Navarro de los encuentros ante el Sevilla Athco y Elche para esperar algo más positivo.Y esperar el regreso del montenegrino.
Apunte Cuando las cosas van mal, el ambiente es aterrador. Saber lo que se está viviendo en Murcia recuerda los peores momentos herculanos: mal juego, bajar los brazos, rajar de cualquier jugador. El descenso del año pasado está haciendo daño. Si el 2007 fue un año de rosas, el 2008 está siéndolo de espinas tras el descenso cuando en la primera jornada jugada en este año ocupaban el 9º puesto. Han perdido 20 de los 25 partidos jugados y Clemente sigue de forma sorprendente.