Como si fuera mal fario, lo que está pasando con el marcador electrónico en el estadio Rico Pérez llama considerablemente la atención-afortunadamente no "reventó" antes del partido internacional entre España y Escocia- por sus problemas a los que se debería extender los que tuvo su predecesor, aquel vetusto marcador que se colocó en 1994. Lejos queda el recuerdo amable de aquel sistema Dardo que estaba en el fondo sur, en el "quesito". Aquellos momentos en los que se estaba pendiente de la relación de marcas comerciales locales y su partido asignado. Ha sido la única vez en la que se ha sentido estima continuada por un marcador sencillo, tranquilo y muy currado. Aquel sistema era el que se veía en el fútbol de nuestros padres y abuelos. Sólo es cuestión de ver las fotos antiguas para ver varios modelos pero el funcionamiento era sencillo y nunca defraudaba.
Llegó 1994 y se colocó el marcador electrónico. Era escueto pero durante los primeros años, su funcionamiento era correcto salvo los típicos deslices como el que bautizó a Sigüenza como Sigu en el partido inaugural de la temporada 1995/96(ya lo de Alfaro como Alf no triunfó tanto) pero su devenir cada vez era más dantesco, las bombillitas impedían por su situación un visionado aceptable. Se llegó a dar como peculiar el hecho de un marcador que fijaba los nombres pero el sector donde estaba el resultado se había estropeado. Su "entorno" fue más peligroso ya que las bandas metálicas que rodeaban el marcador acabó amenazando a parte de la afición del fondo sur que se vio obligada a desplazarse a otra ubicación. Prácticamente, en toda la temporada 2004/2005 no se dispuso del marcador por ninguno de los dos clubes que jugaban en el estadio. La situación fue tan terrible que, en las celebraciones del ascenso a 2ª, Francisco Camps aseguró que la Generalitat Valenciana regalaría un nuevo vídeomarcador electrónico que olvidaba la imagen del vetusto y estropeado aparato. De aquella temporada tenemos el recuerdo de aquel marcador manual que unos aficionados mostraron en un Hércules CF-Novelda CF cuando el equipo dirigido por Granero(fue la 9ª jornada, Mandiá llegó en la 16ª) marcaba el gol de la victoria.
Llegó 1994 y se colocó el marcador electrónico. Era escueto pero durante los primeros años, su funcionamiento era correcto salvo los típicos deslices como el que bautizó a Sigüenza como Sigu en el partido inaugural de la temporada 1995/96(ya lo de Alfaro como Alf no triunfó tanto) pero su devenir cada vez era más dantesco, las bombillitas impedían por su situación un visionado aceptable. Se llegó a dar como peculiar el hecho de un marcador que fijaba los nombres pero el sector donde estaba el resultado se había estropeado. Su "entorno" fue más peligroso ya que las bandas metálicas que rodeaban el marcador acabó amenazando a parte de la afición del fondo sur que se vio obligada a desplazarse a otra ubicación. Prácticamente, en toda la temporada 2004/2005 no se dispuso del marcador por ninguno de los dos clubes que jugaban en el estadio. La situación fue tan terrible que, en las celebraciones del ascenso a 2ª, Francisco Camps aseguró que la Generalitat Valenciana regalaría un nuevo vídeomarcador electrónico que olvidaba la imagen del vetusto y estropeado aparato. De aquella temporada tenemos el recuerdo de aquel marcador manual que unos aficionados mostraron en un Hércules CF-Novelda CF cuando el equipo dirigido por Granero(fue la 9ª jornada, Mandiá llegó en la 16ª) marcaba el gol de la victoria.
Con el nuevo marcador, que se pudo contar a mediados de la primera vuelta, se pudo disfrutar de una nueva imagen, vídeos y la sensación de que el estadio había recuperado algo de imagen con la nueva instalación. Pero pronto, muy pronto comenzó a dar problemas y tras estropearse en la segunda vuelta, no se volvió a utilizar en esa temporada 2005/06. En sucesivos años, el marcador ha ido funcionando a trancas y a barrancas. Cuando lo ha hecho bien también se ha sentido entre los aficionados una sensación de infrautilización. Eran tiempos en los que el funcionamiento era correcto sin más. Cuando se ha querido, se le ha dotado del uso lógico de su capacidad de emisión de imágenes de vídeo grabadas y en directo(por ejemplo, cuando puso el gol de Calvo ante el AD Alcorcón en el descanso del mismo partido) pero seguía siendo un marcador pero no un simultáneo como antaño. En el día del CD Alcoyano, en pleno diluvio, dejó de poder usarse. Ese sonido del ordenador apagando con su mítico sonido de cierre de Windows ha sido el último recuerdo; tras ello, dos partidos sin contar con su uso. Si a eso le unimos la poca labor por buscar publicidad que rodea el marcador(y también la U televisiva, que no se olvide), asombra lo que cuesta arreglar las mínimas cosas.
Apunte: Original es la medida aportada desde León. La mítica Cultural Leonesa, que está pasando un pésimo momento en la Tercera División, ha decidido que las empresas, por tal de que llegue dinero a las arcas, "apadrinen" el jugador de la plantilla que deseen. Los jugadores han cedido sus derechos de imagen al club para que éste lo gestione. La contraprestación sería un ingreso del 10% de un futuro traspaso si interesa algún jugador.