Tras ocho días fuera de Alicante, sin información apenas del Hércules, decidí escribir un artículo dedicado a todos esos herculanos que viven fuera de Alicante y que han de buscar por medios alejados de los deseados noticias de su equipo. Algunos son conocidos por su aparición en foros herculanos, sea desde Vietnam, sea desde Valencia, Salou o Figueres, pero también hay herculanos anónimos que viven a muchos kilómetros de la capital de la Costa Blanca y de los que nadie sabe sus nombres o la razón de que se hiciesen del Hércules. Desde que estamos en 2ªB la situación de estos aficionados ha decaído ya que la información que les llega es escasa o nula por los medios tradicionales: las televisiones nacionales no informan de equipos de esta categoría salvo para alguna noticia negativa, los medios escritos han logrado tal especialización territorial que informan sólo de los equipos de la zona y las televisiones locales no llegan a tantos kilómetros de distancia. Mis recuerdos son más o menos los mismos que esa gente que sufre por no recibir información diario de su equipo. Los comprendo. Cuando me iba de vacaciones a Almería (o a un lindo pueblo almeriense del interior llamado Uleila del Campo) lo pasaba fatal ya que no podía escuchar a Luis Antonio Prieto o a Vicente Crespo, los periódicos informaban de equipos de 1ª o 2ª, así que debía esperar a la llegada a Alicante para informarme de los últimos fichajes, de ese joven portero llamado Fálagan, de los goles de pretemporada de Eduardo Rodríguez, etc. Es más, recuerdo como trataba de imaginarme en el Rico Pérez aunque físicamente estaba en una habitación de una casita de pueblo ya que no llegaban noticias desde Alicante de un partido de pretemporada.
Internet ha dado el paso que ha permitido acercarnos entre todos los herculanos, el mejor modo de comunicarnos entre todos los que sentimos el herculanismo. Nos ha dado la posibilidad de conocer que hay herculanos allende los mares, nos hemos hermanado con aficiones como las del equipo griego llamado Iraklis pero, sobre todo, ha permitido que los herculanos que viven fuera de Alicante vivan el herculanismo como si vivieran en San Blas, Benalúa o en la Florida.