jueves, agosto 18, 2011

Perjudicados

Puede que sea una falta de solidaridad pero los únicos perjudicados por la huelga que se llevará a cabo en esta jornada son los aficionados. Nadie parece reparar en esta situación que puede convertir una fiesta del fútbol en un cementerio. No es un tema de dejarnos sin fútbol por una semana, sino por el hecho de la constante falta de respeto que unos(clubes) y otros(jugadores) llevan realizando al aficionado, sea leal a un club, sea un nuevo simpatizante. Ninguneados por clubes que, a pesar de ingresar más por televisión que por abonos y taquilla, ponen precios exagerados en abonos y entradas y, para colmo, se bajan los pantalones aceptando horarios vergonzosos en perjuicio de los que van al estadio; ninguneado también por muchos de esos jugadores que se hacen las víctimas pero que, como en temporadas como la pasada, se quitan la razón por instantes(ver a alguno pasear por el césped cuando nos jugábamos la existencia es para echar en cara muchas cosas) o diciendo que nadie puso a los clubes una pistola para poner tal o cual cantidad(ya tiene miga que alguno que ha puesto las renovaciones con el Hércules excesivamente costosas,previo chantaje, se queje ahora) cuando, a veces, es para preguntar qué ha movido a un jugador que cobraba cada mes religiosamente firmar por un equipo "dudoso"- algunos futbolistas se han metido en la boca del león por propia voluntad en determinados clubes- porque les ofrecía más pero sin garantía alguna.


El aficionado se ve ahora sin fútbol porque unos señores,LFP, metieron la gamba el año pasado con el deseado cierre que no llegó y unas pretensiones que no se deben de dar y otros,AFE, por una excesiva radicalidad en sus exigencias. De ellas, como remarqué el pasado viernes, dolorosa y absurda es la que pide el descenso de los clubes tanto por meterse en procedimiento concursal(ojo, que también los acreedores pueden solicitar dicha situación, no sólo el deudor y, por ello, se debe seguir unos pasos) como por dejar a deber tres mensualidades, viendo bien que, en determinadas circunstancias, se deje libre al jugador para abandonar al club pero no así un castigo mayor. De esta huelga, ya sabemos un primer inconveniente y es que los jugadores se pueden quedar sin vacaciones navideñas si prospera la última semana de diciembre como solución para esta primera jornada; un segundo inconveniente es que los clubes deben empezar a echar atrás a la hora de ofrecer cantidades que no pueden alcanzar y exigir, de una vez por todas, que haya un peso mayor por el rendimiento ofrecido por los jugadores sobre el terreno de juego, que el sueldo no es sólo por entrenar.


En medio de dos colosos, el aficionado se queda enojado pensando cuál deberá ser la actitud en esta temporada tanto con los clubes(exigir transparencia, buena gestión) como con los futbolistas(demandar un rendimiento correspondiente con su valía deportiva y económica) pero, tras este año, difícil será tranquilizarlo ante tanto absurdo lamento.

Apunte: Ya lo dice el anterior himno madridista: "Cuando pierde da la mano". El problema es que, en los últimos tiempos, la mano ya ha dejado de buscar la del rival para felicitarlo y ha pasado a ser arma. Lo de los instantes finales del FC Barcelona-Real Madrid es de vergüenza ajena y más la actitud de Mourinho, muy distante para el supuesto señorío del club merengue.