martes, febrero 22, 2011

Una amenaza a tener en cuenta

 De todos es sabido que hay una tendencia que procede de la UEFA que quiere que el fútbol esté menos sobrevalorado. Del organismo europeo dirigido por Michel Platini surgió una propuesta  que, bajo el título de Fair play financiero, buscaba unas cuentas que estuvieran más saneadas, dentro de lo posible(habría intención de ir graduando los requisitos para intervenir en competiciones europeas. El R.C.D.Mallorca sufrió el verano pasado los efectos de un procedimiento concursal y vio como se le retiraba la licencia UEFA. No fue el único, al R.C.D. Espanyol se le retiró igualmente aunque no trascendió debido a que el club catalán no se había clasificado. Mucha literatura se ha escrito mencionando los graves problemas que tendrían históricos de la Champions para actuar en esta competición si los requisitos para participar fueran todo lo rígidos que se esperan. Un estudio tras el primer año de funcionamiento desvela que no ha sido todo lo positivo que se espera, quizás porque el hacha no ha  actuado todavía ante un grande(¿se imaginan que la UEFA algún día impidiera al Chelsea participar en la Champions?):el 56% de los equipos de la zona UEFA (733 equipos europeos de primera categoria)presentaban pérdidas, se había incrementado el déficit casi un 100% en relación al año anterior.

¿Y qué tiene que ver ésto con el Hércules C.F.? Al parecer, sería nada, pues no creo que la plantilla esté capacitada para mayores logros como sería participar en la Europa League. Pero el problema de verdad viene desde el viernes pasado- más bien desde el momento en que en el Anteproyecto de la Ley del Deporte se piensa en un organismo que fiscalice las cuentas de los clubes de fútbol- cuando se anunció la pretensión de la LFP de crear un órgano similar al de la UEFA, sin injerencias de otros organismos,  que use los requisitos de la UEFA para decidir quien juegue en la LFP y quién no. Con la sombra de lo acontecido con el Sevilla y el Celta de Vigo en 1995, la patronal del fútbol querría buscar chicos expiatorios con los que demostrar que buscan un equilibrio financiero y, en esa línea, varios equipos se llevan la palma de una gestión cogida con pinzas. La intención no es de actuar duramente desde el principio, otorgándose dos años a los clubes para ir saneando sus cuentas y evitar  una expulsión de la LFP que casi condene a la desaparición. En esas, los clubes con patrimonio tienen su suerte en forma de colchón mas los clubes sin dicho activo deberían sufrir un procedimiento algo más agresivo.

Es ahora cuando el tema implica, entre otros, al Hércules C.F. De todos es sabido el paso por esta temporada, los problemas generados por una inversión considerable en fichajes que, durante unos meses, ha sido un ejemplo mediático por la falta de cobros de la plantilla; otro problema se ha generado por la pérdida de unos ingresos que han sido menores(toda una temporada pasada criticando la famosa "palmera" de la Generalitat Valenciana para acabar luciéndola tras un verano de mucho nombre)de los esperados; aparte está el famoso tema del destino del préstamo con el aval del IVF, que todo apunta, ha ido en la dirección no esperada en un inicio(finiquitar la deuda con administraciones públicas). En menor medida pero importante si se sigue la misma estela, han ido surgiendo errores burocráticos(asunto Bautista o no enviar el fax al Recreativo de Huelva anunciando la intención de dar de baja al jugador), de desidia(no haber cobrado el importe de la cláusula de rescisión del contrato tras la marcha de Juan Carlos Mandiá) o, como surgió la semana pasada, tema de comisiones. Cada aspecto mencionado deja claro que se tiene que dar, desde las oficinas, un giro de 180º para cambiar las tornas en las cuentas del club. Ahora,aparte del peligro deportivo, está el económico más allá de las deudas a los futbolistas el día 31 de julio y que se basa en el control de las cuentas. Lo que tuvo que haber sido la solución(control de cuentas, exigencia a los clubes para un determinado saneamiento) de hace 21 años, en vez de la tragedia en forma de S.A.D. , llega en un momento en que el fútbol es un gigante en este país, capaz de mover sentimientos tales que lograron echar para atrás dos descensos administrativos como aquellos del verano del 95. Por si acaso, empecemos a ponernos a arreglar este asunto económico para evitar que, en caso de seguir en primera, no perder todo lo logrado hasta entonces.