viernes, enero 18, 2008

Recúlanos

Ando yo en pie de guerra con mi procesador de textos que es el mismo que utiliza todo el mundo (salvo el de alguna pequeña aldea de resistentes que utilizan el Mac), para qué engañarnos; o sea, el del amigo Billy Gates. Este episodio bélico no es por nada en especial, sino que cada vez que intento poner la palabra herculanos ( a la tercera fue la vencida), el invento del diablo en cuestión me la convierte en recúlanos. Reconozco, que hasta que capté que el palabro en cuestión hacía referencia al imperativo del verbo “recular”, yo pensaba que se trataba de un miembro de alguna secta, o de un habitante de algún poblado asirio o mundo exterior. El caso, es que parece que el cacharro en cuestión, sabe de fútbol porque, tras un inicio esperanzador de temporada, recular es precisamente lo que está haciendo el Hércules (y de forma preocupante) en la clasificación, hasta el punto de que, otra vez, ya tenemos que mirar con el rabillo del ojo hacia abajo, en lugar de hacia arriba, como sería deseable.
Hablando ya del encuentro del pasado domingo, como se esperaba, ambientazo en la grada, con el habitual intercambio de lindezas entre las aficiones (pero, qué se le va a hacer, esto forma parte también de esta clase de partidos) y menos en el terreno de juego, aunque finalmente, fue el Elche el que se llevó el gato al agua, y traslada al Hércules la necesidad de recuperar en los próximos dos encuentros que tiene fuera de casa, lo que ha perdido, precisamente en casa, si no quiere meterse en lo que coloquialmente se denomina “un jardín”, por no llamarlo barrizal.
Con todo, parece que se está instaurando otra tradición en el Hércules, y es convertir los derbys, en el bautismo de fuego de algún pobre canterano (o varios). No estoy diciendo con ello que no se les den oportunidades pero, quizás, no sea el partido más indicado (además de que su ingreso en la plantilla debe ser menos traumático), a pesar, de que pueda tener su dosis de carga emotiva.
Y ahora a esperar a lo que acontezca estas dos semanas próximas en la que Goikoetxea también puede ver complicado su futuro .