domingo, agosto 14, 2005

"Operación Salida"

Como la mayoría de equipos, el Hércules se encuentra en una situación problemática a la hora de conseguir que los descartes dejen el club, hecho que no es fácil debido a las complicaciones que ponen los propios jugadores a la hora de salir, aún siendo conocedores de que el entrenador no cuenta con ellos. Estas "operaciones salida" son el ejemplo más claro y evidente del enorme disparate de sueldos, fichas que se firman en este mundo del fútbol puesto que los jugadores niegan reducir su ficha por tal de facilitar su marcha del club. El viernes pasado salió una noticia en el diario INFORMACIÓN en referencia a la difícil labor que debe realizar el club para culminar la salida de los últimos jugadores que quedan en el club sin entrar en los planes de Mandiá: Chiqui, Rubén y Fernando. El coste por estos contratos desmedidos alcanza cifras considerables para la 2ªA y de gran irresponsabilidad de haber seguido en 2ªB. Parece que el club quiere aprender mediante la realización de contratos por un año, ampliable a otro en función de partidos jugados. Al menos es de agradecer que hayan captado el gran error de tales contratos de gran duración.


Sin embargo, este trabajo es cuestión de dos y son los jugadores los que han de colaborar en esta labor de salida en beneficio de ellos. Resulta curioso como los futbolistas son los primeros en ir pidiendo dinero y ampliar la duración del contrato pero luego no hacer lo contrario cuando el "mercado" así lo demanda; el mismo Barcelona en plan alocado, al igual que el Madrid de hace dos años, ha decidido renovar a varios jugadores claves hasta el 2010 e incrementando sus fichas- Abramovich hace ricos a los jugadores que pretende sin mover ni una sola libra de la caja del Chelsea- sin parar en pensar que se les pueda repetir un caso Saviola, con fichas inaccesible para el resto de los "mortales". Los propios jugadores,como he comentado antes, se niegan a salir renunciando a su ficha considerable en perjuicio de su carrera deportiva. Varios jugadores, de todos conocidos, llevan camino de un año de ostracismo por tal de no renunciar a su ficha en beneficio suyo y del equipo destinatario. Entiendo que si un jugador tiene un contrato jugoso puede preferir un año sin jugar y cobrar "X" cantidad a cobrar menos y poder jugar pero no creo que sea capaz de captar que tal actitud les perjudicará en un futuro. Pongamos el caso de Iván Rosado(Osasuna), que tiene un contrato por el que cobra una cantidad "X" de dinero(cercana a 100 millones de las antiguas pesetas), y que ha rechazado ofertas por seguir con Aguirre a pesar de que apenas jugará; el jugador onubense podría haber aceptado jugar en otro equipo por menor cantidad pero en la 2ª División A; en vez de ello, podría ser que tras tres años sin apenas jugar nada no tuviese más ofertas que de 2ªB o Tercera, con una ficha considerablemente más baja y perdiendo caché por momentos. Es algo injusto pedir a alguien que renuncie a una parte considerable de la ficha pero, si uno quiere jugar, es el único camino para poder volver a ser el de antes. Ya se sabe: retroceder un paso para adelantar dos. Otra cosa será que prefiera el dinero antes que disfrutar sobre el terreno de juego.


Apunte Esperemos que "Ciudad de la Luz" se replantee el diseño de la publicidad suya en la camiseta herculana pues apenas se percibe cuando lo sencillo sería que las letras fueran en blanco sobre el fondo azul de la franja central.