miércoles, agosto 11, 2004

PRETEMPORADA ¿PARA OLVIDAR?


Cuando un equipo realiza una pretemporada, la valoración cuesta en el día a día y sólo, al final, podemos opinar sobre el análisis. Sin embargo, entendiendo al cuerpo técnico, esta época es importante desde el punto institucional. Una buena pretemporada anima a la afición a abonarse pero también puede perjudicar en cuanto no percibes los defectos ya que los rivales son más flojos de lo habitual; por otra parte, se suele comentar la posibilidad de que una pretemporada negativa puede afectar la campaña de abonos pero el entrenador puede conseguir descifrar los posibles fallos y sabrá corregirlos antes de que empiece la competición oficial. ¿Ejemplos? Dos y en la misma temporada: el Hércules y el Deportivo de la Coruña hicieron dos pretemporadas diferentes y, unos meses después, el equipo coruñés de Toshack acababa el 9º mientras el equipo herculano subía a 1ª División. ¿No ha quedado claro? Obviamente, no. En esa pretemporada, Manolo Jiménez se jugaba la cara en cada partido y los malos resultados le colocaron en la diana mientras el galés triunfaba en la pretemporada, como se recuerda de esas dos victorias contra el Madrid en la Supercopa de España. Cuando el Deportivo paseaba discretamente por los puestos intermedios de la clasificación, la gente ya había bautizado al equipo coruñés con el nombre de "el chiringuito" ya que "sólo funciona en verano". Paralelamente, el Hércules se posicionaba en los primeros puestos de la clasificación y el entrenador confesaba que los malos resultados del verano ayudaron a tratar de mejorar la situación en las diferentes líneas. Dos equipos que mostraron que, a veces, una gran pretemporada no significa nada y viceversa. Este ejemplo viene a cuento de que el Hércules lleva dos resultados malos en la pretemporada y preocupa ya que, en esta temporada ,no se podrá fallar. El recuerdo de esa pretemporada del año del ascenso se suele invocar para que la gente no se ponga nerviosa con los resultados pero empatar con el Denia con el supuesto once que jugará contra el Huesca o el cero - cero en San Vicente no genera buenas expectativas de cara a que los aficionados se conviertan en abonados y más cuando todo parece seguir por el mismo camino de la temporada pasada. Cuando el deseo herculano es que el abono sea independiente de la trayectoria del club, muestra absoluta de fidelidad al club, los hechos recientes como la crítica del director general a la afición, el habitual pasotismo que desde la cúpula se va mostrando en el día a día, provocan una sensación de miedo al futuro, escepticismo, alejados de la seguridad de aquella directiva que formaban Fernando de Andrés, José Ramón Solano y Aniceto Benito en el año del ascenso. En el equipo de Granero depende parte del éxito de la campaña de abonos. Un ejemplo más de cómo la pescadilla que se muerde la cola.