miércoles, agosto 04, 2004

Enemigos de fuera

Con ocasión del descenso del Logroñés he leído muchas cosas procedentes de medios riojanos y encuestas realizadas entre logroñesistas y observo cosas que me recuerdan algo a Alicante, entre herculanos y alicantinistas. Es curiosa la tendencia de culpar a un ente ajeno de los males de un equipo cuando éstos están ,a su vez, en el interior del club.

Como la gente recuerda de otro artículo que escribí en esta weblog, llamado "La sombra creada", el Logroñés ya tenía problemas ante el 31 de julio y sonaba su posible desaparición ya que Martín Berrocal, máximo accionista del club riojano, deseaba salir del club ante las deudas acuciantes. Unos hechos posteriores cambiaron el sentido de la noticia: un empresario de nombre muy "artístico", Arturo Fernández se hacía cargo del club y parecía que el Logroñés tenía vida...hasta ayer. Desde que en julio del 2000, recién descendidos de 2ªA, bajaron a Tercera por impago a los jugadores, esperábamos muchos que un equipo como el Logroñés no tuviese más problemas... pero éstos llegaron en diciembre de 2002 cuando el equipo no acudía a un desplazamiento a tierras oscenses. Llegó a sonar el empresario Luis Oliver pero ,al final, el ganadero Martín Berrocal se hacía cargo del club. Las deudas con los jugadores fueron el preludio de una temporada difícil: el Logroñés estuvo a punto de bajar por "méritos" deportivos y los futbolistas sin cobrar desde enero. Ahora las culpas de lo de ayer se dirigen hacia el Ayuntamiento, acusándoles de "favoritismo" hacia el Recreación y ,a la vez, desear el hundimiento del Logroñés(entre otras cosas por no concederles una subvención municipal por pedir un aval...además de la petición del otro equipo de jugar en el Nuevo Las Gaunas).El propio Martín Berrocal criticaba al Consistorio de haber espantado al nuevo empresario que, en teoría, venía a salvar al equipo. Sea como sea, desde la dirección del club no se ha querido resolver esta situación y el equipo debe salir desde Tercera, con el máximo rival ciudadano en una categoría superior y con el camino expedito para solicitar que juegue en el estadio cuyo nombre es sinónimo de CD Logroñés. Por desgracia, pasará a la historia por descender dos veces de categoría por no pagar a sus jugadores. Suerte desde la capital de la Costa Blanca. ¡¡La necesitáis!!

Los herculanos no debemos desaprovechar las lecciones que nos transmite esta historia trágica, aprenderlas es importante. Así, criticar al Ayuntamiento por la dejadez con el Rico Pérez y con el hecho de dejarles jugar en el estadio emblemático del Hércules, al Alicante por su actitud de los últimos años o, por ejemplo, al mismísimo Txutxi no nos exime de vigilar a los dirigentes de este club, verdaderos guías del éxito o el fracaso institucional: campos de entrenamiento inexistentes, nulas relaciones con la "sociedad civil alicantina", o no tener las ideas claras de cómo se quiere que sea el Hércules fuera del terreno de juego son algunos de los problemas últimos. Buscarse enemigos de fuera es cosa de otros tiempos...

MACHO HÉRCULES